El Burgos, en busca del efecto Menéndez

Tras haber sumado apenas un punto en las últimas cuatro jornadas, sufrir la destitución de Patxi Salinas y superar dos partidos con el director deportivo, Nacho Fernández, como entrenador, el Burgos parece haber pasado por su particular travesía en el desierto. Una travesía que pretende cortar de raíz.

De momento, Menéndez ya ha conocido de primera mano al equipo, y ha destacado la calidad de la plantilla y su solidez defensiva, esa que le ha hecho ser uno de los conjunto menos goleados de la categoría. El reto, así, pasa por incrementar la efectividad anotadora. Y es que, con apenas 18 goles a favor, el Burgos no puede aspirar a pelear por los puestos de play off, objetivo marcado por la propia directiva en la pretemporada.

Y en esas estamos. En estos primeros entrenamientos, el técnico asturiano ha incidido mucho en incrementar la presencia ofensiva del equipo. Tal y como aseguró en su presentación, el objetivo del Burgos debe ser no «especular» e ir al ataque desde el primer minuto, sea cual sea el rival.

Eso sí, Menéndez apenas ha dado pistas sobre su apuesta concreta, aunque todo hace indicar que no aplicará muchos cambios en estas primeras jornadas. Queda por ver el sistema elegido, ya sea con un punta o con dos. De momento, el técnico ha convocado a 19 futbolistas para el choque de mañana y no ha habido grandes sorpresas, más allá de la inclusión de Lucas Anacker como segundo portero y el regreso de Madrazo tras cumplir sanción por acumulación de tarjetas el pasado fin de semana.

Enfrente estará un equipo rocoso como el Arenas de Getxo, que con 30 puntos en su casillero (8 menos que el Burgos) se sitúa en la décimo cuarta posición de la tabla, lo que le obliga a no bajar los brazos si no quiere pasar agobios en la tecta final de la temporada. El conjunto vizcaíno, que ya en la primera vuelta consiguió secar al Burgos, se está mostrando muy irregular. Y es que, los buenos resultados obtenidos en su feudo chocan frontalmente con el escaso bagaje que acumula lejos de su estadio, donde apenas ha podido ganar un partido.