Los detalles marcan la diferencia en el fútbol. Así lo entiende el entrenador del Burgos CF, Jon Pérez Bolo, que ha asegurado en rueda de prensa que la derrota cosechada por su equipo en Anduva frente al Mirandés se sustenta sobre «dos jugadas» muy ... concretas: el penalti de La Gumina y la mala defensa del córner en el segundo gol rojillo.
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Dos jugadas que, a juicio de Bolo, han echado al traste el buen trabajo desplegado por sus jugadores durante buena parte del choque. «Hemos hecho un buen trabajo durante los primeros 60 minutos», pero tras el empate, todo se ha ido abajo.
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«No estábamos sufriendo mucho. Hemos hecho lo más difícil» con el gol de Arroyo y «teníamos el partido totalmente controlado», ha asegurado el técnico vasco. Sin embargo, el empate de La Gumina ha dado alas al Mirandés, que a partir de ahí se ha ido «arriba» y ha dado la vuelta al marcador.
Cierto es que el Burgos luego ha tenido «ocasiones» para empatar de nuevo, incluida una postrera acción de Lucas Ricoy, pero el esfuerzo ha sido en vano. «Teníamos que haber tenido más el balón tras el 0-1. Luego ellos se han juntado bien y se han cerrado», lo que ha acabado por decidir el choque, ha añadido Bolo.
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