Un autogol elimina a un discreto Burgos CF de la Copa

El buen arranque del equipo de Julián Calero fue tan esperanzador como efímero. Bermejo confirmó ese positivo inicio con un remate que acabó convertido casi en un oasis dentro de un primer tiempo en el que el Eldense dejó clara su condición de líder del grupo 2 de Primera RFEF y su atrevimiento a la hora de ir a por el partido. La presión del conjunto alicantino incomodó a un Burgos impreciso y timorato, que vivió muchos minutos refugiado y a expectativa, tratando de sacudirse el dominio y pisar área contraria, aunque sin apenas conseguirlo.

Para Julián Calero hubo un contratiempo añadido: la lesión de Zabaco a los trece minutos le obligó a realizar el primer cambio de manera prematura y Grego fue el reemplazo. Nieto fue el primero en poner a prueba a Dani Barrio, que resolvió la ocasión con un buen despeje.

Al dominio del conjunto azulgrana, con un Álex Martínez muy incisivo por el flanco izquierdo, le faltó precisión en los metros finales para poder materializarlo en gol. Último pase sin destinatario, centros sin rematador…el conjunto de Fernando Estévez, viejo conocido de la afición burgalesa, amenazaba, pero sin golpear. Como en un testarazo de Nieto que no vio puerta.

Poco se supo de la escuadra de Calero ofensivamente desde la ocasión inicial hasta que apostó por adelantar a Curro para que Artola, que no pudo concretar un buen servicio de Raúl Navarro, no fuera un islote rodeado de rivales. El propio Artola tampoco acertó a definir la mejor jugada asociativa del Burgos en el primer periodo. Cristian López y Soberón avisaron antes de que, cerca del descanso, llegará el 1-0. Fue en una jugada desgraciada en la que Córdoba, en su intento de despeje con la cabeza, convirtió en gol un centro de Diego.

Poco cambió tras el intermedio. Lejos de replegarse y buscar sentenciar a la contra, el equipo de Estévez salió convencido para tumbar a un rival y Dani Barrio, muy entonado, mantuvo al Burgos CF en el encuentro tras desbaratar un remate de Nieto.

Los cambios dieron aliento al conjunto de Calero y el esfuerzo fue pasando factura a la escuadra azulgrana. Fran García tuvo en sus botas el empate, impedido sobre la línea de gol por un jugador local. Mourad se quedó con las ganas de poder finalizar un balón que Pablo Valcarce elevó ante Stamatakis y un remate de Miki Muñoz con poca fe se perdió lejos de la meta del Eldense.

Hubo más corazón que cabeza en las acometidas finales del Burgos CF. Saúl firmó la última ocasión del equipo de Calero, que cierra el año con sabor amargo.