Las zonas verdes del Hospital de la Concepción se reubican para dar cabida al archivo provincial, con salida peatonal a San Pablo

El edificio histórico del Hospital de la Concepción no cuenta con espacio suficiente para usos universitarios y el Archivo Histórico, de ahí que el Ayuntamiento se comprometiese a ceder a la Universidad de Burgos (que es la que tiene cedido el uso del Hospital de la Concepción) 637 metros cuadrados de las zonas verdes para ubicar en ellos el anexo previsto. A cambio, la UBU cedería para uso público la zona colindante con el IES Enrique Flórez, que se convertirá en una vía peatonal.

Y para que la permuta se pueda llevar a efecto es necesario modificar el PGOU. Así, en el documento que se ha presentado esta mañana, se recoge una reubicación de las zonas verdes del Hospital de la Concepción. La superficie verde seguirá siendo la misma, ha asegurado el alcalde, Javier Lacalle, pero con una disposición diferente. Ocupará toda la trasera del eficio histórico más esa salida hacia la calle San Pablo, que será una vía pública de acceso libre.

La modificación la están analizando los servicios técnicos y jurídicos del Ayuntamiento, con la idea de poder aprobarla de manera provisional en el Pleno del próximo 16 de noviembre. Se abriría entonces un periodo de información pública de dos meses, con recepción de los correspondientes informes sectoriales, el principal, el de la Comisión de Patrimonio de la Junta de Castilla y León. El objetivo es que la modificación esté aprobada definitivamente en el primer trimestre y, a continuación, se firmará la permuta.

Mientras, en el Ministerio de Cultura están elaboradon el proyecto básico para la rehabilitación del Hospital de la Concepción. Sus técnicos han visitado en varias ocasiones el edificio, para tomar medidas y realizar los informes que permitan no solo plantear un proyecto de restauración sino también diseñar la redistribución de espacios para la Universidad y el Archivo Histórico Provicial.

El rector de la UBU, Manuel Pérez Mateos, ha recordado que hay un prediseño, pues habrá espacios compartidos como las salas culturales, las de exposiciones o el paraninfo de la Universidad, que será salón de actos del archivo. La UBU quiere ocupar las antiguas enfermerías, del siglo XVI, y el anexo será de uso exclusivo para el archivo. Sin embargo, todavía hay que «aclarar» la distribución.

Por ese motivo, la Univeridad y el Ayuntamiento solicitará una reunión a cuatro bandas, con las administraciones implicadas en el proyecto, a fin de abordar estos detalles en noviembre o diciembre, como muy tarde. Una vez esté elaborado el proyecto básico, el Ministerio de Cultura sacará a concurso la redacción del proyecto de ejecución, que podría estar entregado en 2019. Se trata de que las obras comiencen en 2020 y, si fuera posible, ya a finales de 2019.