Los vecinos de San Pedro de la Fuente y Fuentecillas exigen el arreglo del parque de la Cecina

El deterioro de este espacio, tal y como explican desde la asociación, «obligó a acelerar los contactos iniciados con el Consistorio para implicar a todos los grupos políticos y la comunidad de vecinos, propietaria del suelo, a superar el aspecto legal que frena cualquier intervención». En este sentido, aseguran que, tras mantener reuniones con todos ellos y constatar que se trata de una petición de «sentido común» y «de arreglo urgente» y recabar de los representantes de los propietarios la disponibilidad de acordar ese permiso de actuación, exigen que todo se materialice «cuanto antes».

Piden que este acuerdo entre el Ayuntamiento y los propietarios «sea una realidad para tapar los desconchones del firme que son numerosos y en puntos clave, como la parte bajo el tobogán«, señalan. Además, proponen que se sustituyan las piezas que faltan, ya que »no hay balancín doble ni individual, retirados tras romperse pero que no se sustituyeron; la red en el tobogán tiene las cuerdas rotas que, al ser de metal y dejan algunas hebras al descubierto«.

También consideran necesario sustituir los columpios: «Uno no está y el que queda se mantiene porque un vecino lo arregló. No pedimos un parque nuevo, más grande o completo, queremos que se arregle para no llevarnos un susto».

La plaza de la Cecina es un espacio de ocio que une las dos zonas de San Pedro de la Fuente y Fuentecillas en un mismo barrio, se trata de una zona amplia, a la que acuden numerosas familias jóvenes con niños pequeños. Los vecinos definden que, además, es un lugar céntrico, próximo a superficies comerciales, centros educativos y hosteleros que facilitar su uso. Amplitud que permite al Centro de Acción Social del Barrio disponer de él para sus actividades al aire libre.

La relevancia y utilidad de esta zona hace que para los residentes del barrio sea «urgente» una solución «aunque sea transitoria, hasta que se apruebe la modificación del Plan General de ordenación urbana de Burgos y que, definitivamente, quede consolidado como espacio público y no privado como es ahora», concluyen.