Burgos sufrirá una huelga de basuras a partir del 3 de abril si nadie lo remedia

En la asamblea celebrada este martes, 151 trabajadores han votado en contra de la oferta, frente a los 37 que la han apoyado. «Es un no rotundo a la última propuesta», afirman desde CGT, así que toca reunión del comité de empresa con Urbaser y el SERLA, al que habían solicitado mediación, para explicarles la situación.

Y, a partir de ahí, iniciar los trámites para convocar una huelga de basura desde el 3 de abril. Los trabajadores van a seguir abiertos a negociar, confiando en que la empresa recapacite y ofrezca algo que se pueda aceptar. También cuando arranque la huelga, pero «ya será una negociación en otras condiciones».

La empresa había planteado firmar un convenio de transición para 2022 y 2023, ya que no tendrán revisión de precios con el Ayuntamiento hasta 2024, y luego negociar un acuerdo más a largo plazo. Para salvar estos años ofertaban una paga de 300 euros en 2022, con solo 100 consolidables, y otros 600 para 2023, todos consolidables.

Sin embargo, los trabajadores lo ven insuficiente, pues son solo 40 euros brutos más al mes y llevan con el suelo congelado desde 2020, acumulando pérdidas económicas. «Estamos perdiendo mucho», afirman desde CGT, y más con la importante subida de precios. Así que quieren que la empresa esté a la altura de las circunstancias.

De este modo, y si no hay nuevas ofertas por parte de Urbaser o se llega a un acuerdo, la plantilla se pondrá en huelga el próximo 3 de abril. Y al Ayuntamiento de Burgos le corresponderá organizar los servicios mínimos para garantizar la recogida de basura y la limpieza de la ciudad, insistiendo en que la responsabilidad es de la empresa contratada.