Uno de los acusados, de espaldas, y sentado frente al Tribunal. JCR

Las testificales en el juicio de proxenetismo señalan a dos de los tres acusados

El proceso contra la red que actuaba en Burgos entre 2014 y 2015 termina hoy en la Audiencia Provincial con casi 30 testimonios de testigos. Sobre el tercer acusado solo pesa la detención por forzar la puerta de uno de los pisos en los que se ejercía la trata

Lunes, 25 de septiembre 2023, 19:07

El juicio contra la red de presuntos proxenetas que se celebra en la Audiencia Provincial termina este martes con las últimas testificales y los alegatos de las partes. En la jornada de este lunes se han leído las declaraciones en sede judicial de varias testigos ... protegidas que por hallarse en paradero desconocido no han estado presentes en las diferentes sesiones.

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Además han comparecido otros testigos secundarios, como los propietarios de los pisos y locales que tenían alquilados los acusados y algunos servicios externos contratados por ellos.

La lectura de los testimonio de la mujeres en paradero desconocido, sin posibilidad «de contradicción» ha sido rechazada por los abogados de los tres procesados. Para la defensa, este procedimiento no permite conocer los hechos en primera persona y han protestado ante el juez esta decisión. Sin embargo la Sala lo admitía en la sesión segunda del juicio a petición del Ministerio Fiscal.

Las declaraciones de las testigos en sede judicial leídas en este tercer día de juicio apenas han diferido en algo sustancial con respecto a las testificales realizadas en la sala por parte de otras mujeres que también acudían en calidad testigos, fueran protegidas o no. En estas pruebas realizadas, todo apunta al principal acusado de la trama, M.H. y a su supuesta socia, E.M.

Los relatos, muy explícitos algunos de ellos, colocan a M.H. como inductor a la prostitución y como organizador de toda la trama. En algunos casos, esa inducción era realizada a mujeres menores de edad en esa época. Algunas de ellas, además, le acusan de infligir vejaciones y amenazarlas con informar a sus familias de la actividad que realizaban.

En una línea más secundaria, pero en todo caso como colaboradora, colocan a la supuesta socia del hombre, E. M., pues según el testimonio, tanto de las mujeres como de testigos secundarios, estaba casi siempre presente en las captaciones y en las incitaciones a la prostitución. La realidad es que, según lo recabado en el juicio, la actividad se realizaba en varios pisos y que la actuación policial resulto clave para la liberación de las mujeres que se encontraban a merced de los supuestos extorsionadores.

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Este martes terminan los interrogatorios y se dará paso a continuación a las conclusiones tanto de las respectivas defensas como del Ministerio Público.

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