Borrar
Miembros de la Cofradía de las Siete Palabras desenclavaron al Santísimo Cristo de Burgos. Ricardo Ordóñez / ICAL

Solemnidad en el Desenclavo, que recupera el besapié

Cientos de burgaleses participan en el Desenclavo del Santísimo Cristo de Burgos, que recupera toda la normalidad previa a la pandemia

Viernes, 7 de abril 2023, 14:50

Cientos de burgaleses se han dado cita hoy bajo un sol de justicia a los pies de la Catedral para compartir el acto del Desenclavo, una de las citas más importantes del Viernes de Pasión de la Semana Santa Burgalesa. Una cita que este año ... recuperó la más absoluta normalidad tras tres años marcados por la covid-19.

Y es que, por primera vez desde 2019, el acto ha contado con el tradicional besapié a la réplica del Santísimo Cristo de Burgos, talla venerada en la ciudad como pocas.

Una hora antes, el Cristo crucificado salía desde la puerta del Sarmental a hombros de los miembros de la Cofradía de las Siete Palabras en dirección a la Plaza de Santa María. A mitad del recorrido esperaba ya la talla de la Virgen de la Consolación, que minutos antes salía de Santa Águeda portada por la Cofradía de Nuestra Señora de la Misericordia y de la Esperanza.

Una detrás de la otra, ambas tallas entraban en la Plaza de Santa María, donde se agolpaban ya cientos de burgaleses y foráneos, ansiosos por ver uno de los pasajes más dolorosos del Nuevo Testamento, aquel en el que una madre ve cómo su hijo muere en la Cruz.

Como es tradición, los miembros de la Cofradía de las Siete Palabras izaban al Cristo antes de la lectura del pasaje bíblico. Posteriormente, procedían al desenclavo del cuerpo y su presentación a la Virgen con el sonido de la carraca de la Catedral de fondo.

Noticia Relacionada

Para entonces, la solemnidad y el silencio reinaban en la Plaza de Santa María y todos los presentes recibían la bendición del arzobispo, Mario Iceta, que reflexionaba sobre el dolor supremo que supone perder a un hijo. Un dolor difícilmente igualable y representado en la talla de la Virgen.

Una talla que, tras despedirse del Cristo, regresó a Santa Águeda mientras las diferentes autoridades y cofrades presentes procedían a participar en el tradicional besapié, que regresaba con normalidad tras la pandemia. El año paasdo, ya casi sin restricciones, se decidió no realizar el besapié, siendo sustituido por reverencias personales.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

burgosconecta Solemnidad en el Desenclavo, que recupera el besapié