El sector del ocio nocturno, a la expectativa de las decisiones de la Junta a raíz de la covid

«No nos extrañaría nada» que Sanidad incrementara sus medidas de control o que incluso limitara el ocio nocturno, según reconoce José Luis Llorente, portavoz de los locales con licencia de discoteca dentro de la Federación de Hostelería. «Viendo hacia dónde está derivando la situación» y con el ejemplo de las decisiones adoptadas al respecto en otros territorios durante las últimas jornadas, el sector en Burgos teme otro duro golpe.

En este sentido, Llorente reconoce que la situación es muy compleja. Las características intrínsecas del sector hacen que sea uno de los más difíciles de gestionar en una situación excepcional como la generada por la pandemia de la covid. Mantener las medidas de seguridad en el interior de un local durante toda la noche no es fácil. «La gente bebe y se olvida de las normas», lo que obliga a los responsables de los locales a estar más vigilantes que nunca para cumplir y hacer cumplir la miríada de normas impuestas para su apertura.

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Sin embargo, y a pesar de seguir aplicando las medidas (distancia de seguridad, aforos limitados, uso de mascarillas, etc), está claro que el ocio nocturno tiene riesgos de contagio y expansión de la pandemia. Eso sí, dichos riesgos no son muy diferentes de los inherentes a otros muchos sectores. «También se han detectado muchos brotes en otros sectores y no se han parado», sostiene. «Nos puede pasar a cualquiera. Al final, en muchos casos es una cuestión de mera suerte. La diferencia es que a otros sectores no se les ha criminalizado», añade Llorente.

De esta forma, los hosteleros de la noche están a la expectativa de las decisiones que vaya tomando la Junta en las próximas jornadas. No en vano, nuevas restricciones pueden suponer la puntilla para muchos establecimientos. La fotografía de situación es muy compleja. «No salen las cuentas». De hecho, para muchos -en Burgos hay algo más de una treintena de establecimientos con licencia de discoteca- no salen desde los primeros compases de la pandemia. Cierto es que aquellos locales bien situados están paliando parcialmente la crisis gracias a las terrazas, pero con eso no basta. Como mucho, cubren gastos, subraya Llorente.