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Es nada más un gesto. Pero es en las cosas pequeñas, en lo cotidiano, donde las acciones adquieren valor. Los grupos de la parroquia de San Juan de Ortega se plantearon realizar una iniciativa, una acción vecinal con la que «expresar la riqueza y variedad ... de las necesarias relaciones vecinales, así como homenajear a aquellas personas que contribuyen o han contribuido a las mejoras del barrio».
Y ¿qué podían hacer? Una acción sencilla y fraterna. Más de cincuenta vecinos y vecinas del barrio se pusieron el 12 de enero a tejer lana una 'Bufanda Gigante' que expresara es «riqueza vecinal y como homenaje a quienes trabajan por el barrio».
Una bufanda que tiene pegada en ella los nombres de aquellas personas que, en el pasado y en el presente, han trabajado con firmeza por un barrio «que siempre ha sido solidario», ha recordado Conchi Pérez en la lectura del manifiesto que ha abierto la acción.
En el ambiente se respiraba ese aire de complicidad vecinal, de acogida y de trabajo por la comunidad. Toda esta gente, de alguna manera, estaba presente en el recuerdo de la vecindad. Todo el mundo era acogido y bienvenido y, cada cual a su manera, ha puesto su granito de arena en la acción.
Es una iniciativa de la campaña 'Vecineando', con la que se pretende «conocer y querer más el barrio, reforzar las relaciones de vecindad y tomar más conciencia de las necesidades comunes que se tienen», explican Conchita, voluntaria de la parroquia y Javier García Cadiñanos, el cura del barrio.
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Con la idea de hacer ese homenaje, había que buscar un signo. Ese signo es la bufanda gigante de lana que ha llegado a los 75 metros. A las 13.30, las personas voluntarias y el público -unas 200 personas- se aprestaron a rodear los postes de la entrada del Centro Municipal,
Los protagonistas de la acción no fueron ni el voluntariado, ni los tejedores, ni quienes pusieron en marcha la iniciativa. Fueron los vecinos, las vecinas, los mayores, los más pequeños del barrio. Porque desde la parroquia entiende que es «el vecindario» quien ha sido homenajeado. Entienden que ir por libre no es la solución. Con el acto demuestran que todo el mundo es mejor «si vamos juntos, si nos arropamos, si trabajamos en común, si tejemos vecindad«, como dice el comunicado
Los organizadores del acto han apuntado que en los tiempos de inclemencia actuales marcados por «el individualismo y competitividad, esta Bufanda Gigante simboliza el calor de lo colectivo y organizativo que nos hacen avanzar hacia adelante».
La acción en el barrio de San Cristóbal por parte de la gente que participa en la parroquia de San Juan de Ortega, no es aislada. Y no se circunscribe al ámbito pastoral. San Cristóbal es un barrio solidario. Recuerdan que en la Navidad, «más de una docena de establecimientos donaron una gran variedad de productos con los que se elaboró una cesta solidaria a favor de las familias en situación de vulnerabilidad».
La recaudación de 1.850 euros se va a distribuir a través de Cáritas para paliar la pobreza energética que asola a muchas familias.
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