Gastronomía burgalesa para el fin de fiesta

Como siempre, pero después de dos años de ausencia, el Día de las Peñas ha regresado a Fuentes Blancas con cientos de personas que han disfrutado de una jornada soleada, aunque algo ventosa. Esto es Burgos. Con las ganas recuperadas y el ambiente festivo que no les ha faltado durante los Sampedros, las peñas y casas regionales se han instalado en Fuentes Blancas para celebrar una jornada festiva y de hermandad.

La jornada ha comenzado a las 11.30 con las autoridades y reinas sobre el escenario y el público haciendo corro para ver bailar a los Danzantes de Burgos y al Gigantillo y a la Gigantilla. Este año, en cambio, no ha habido la recepción del Burgalés Ausente, que se celebró en el salón de plenos del ayuntamiento en el día central de las fiestas, el 29 de junio, san Pedro.

Después se ha celebrado una misa de campaña ante la imagen de la virgen del Álamo. Tras esta, ha comenzado el Concurso del Buen Yantar. Este concurso gastronómico es respetado y disfrutado por las peñas y casas regionales. Con él se busca ensalzar la cocina burgalesas y los productos oriundos, por eso, en esta ocasión, el ingrediente obligatorio de los platos que preparan peñas y casas regionales ha sido la patata agria de Burgos.

Cada uno en su puesto, que por la mañana se afanaban en poner curioso y adornado, ofrece sus elaboraciones. A última hora de la mañana, sobre las 15 horas, el jurado falla los premios de este concurso.

46 peñas han participado este año en esta festividad. Trece de estas han montado puestos de venta para el público. Allí vendían bebida, pero también esos manjares tan típico de una jornada campestre, chorizo, morro o tortilla. El resto, los 33 restantes, han acudido también pero a pasar el día con los socios de las peñas y disfrutar de la jornada.