Tal y como anunció la portavoz del equipo de Gobierno la semana pasada, el Servicio de Movilidad y Transportes (SMyT) del Ayuntamiento de Burgos asumirá desde este sábado, 15 de febrero, la gestión de las tarjetas de autobús urbano tras el cese del servicio de Prepay, que se encuentra en concurso de acreedores.
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Según ha quedado definido, las recargas se podrán hacer de manera telemática con tarjeta de crédito, débito y sistema Bizum y de manera física en los equipos habilitados a tal efecto en los centros cívicos de Burgos, en la biblioteca Miguel de Cervantes, en la sede del servicio de Movilidad en la antigua Escuela de Relaciones Laborales o en la sede central del Consistorio, en la plaza Mayor.
Así lo ha explicado el concejal de Movilidad, José Antonio López, quien ha reconocido que ha sido un «proceso complejo» asumir la gestión de la recarga de las tarjetas después de que la empresa Prepay, encargada de la gestión en los últimos 11 años, entrase en concurso de acreedores y «estafara una cantidad ingente de dinero a todos los burgaleses» al no ingresar en las arcas municipales el dinero de esas recargas.
No obstante, López ha indicado que desde el equipo de Gobierno se ha buscado «un plan alternativo para garantizar con total normalidad la prestación del servicio» de recarga. Un plan mediante el que se articulan nuevas formas de recarga y se desactivan las máquinas instaladas en varias calles de la capital.
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El horario para las recargas en los centros cívicos, biblioteca y Ayuntamiento es de 9.00 a 14.00 horas y de 17.30 a 19.30 de lunes a viernes; en el Servicio de Movilidad, de 8.00 a 15.00 horas, mientras que en el caso del Ayuntamiento también se podrá recargar los sábados de 9.00 a 14.00 y de 17.30 a las 19.30 horas.
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Con la nueva gestión, los usuarios «no van a perder el dinero que hay en las tarjetas», ha aclarado López, quien ha precisado que los burgaleses podrán seguir adquiriendo «tarjetas nuevas en cualquiera de los puntos citados» y el sistema de compra será «con carta de pago».
El coste de todo este plan transitorio, encargado al Instituto Tecnológico de Castilla y León mediante un contrato de urgencia valorado en 15.000 euros.
Desde la Concejalía de Personal se ha adoptado «un plan de contingencia» de cara a cubrir no sólo esta eventualidad, sino las necesidades que existen, en otras áreas. Así se ha procedido a la contratación «auxiliares administrativos».
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A partir de ahí, el Ayuntamiento está trabajando en una alternativa a largo plazo para garantizar la continuidad del servicio, que seguirá siendo gestionado de manera directa por el Ayuntamiento a través de un pliego valorado en 137.000 euros.
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