Ya no se puede aparcar en la ladera del Castillo en el entorno de San Esteban. En realidad, nunca se ha podido, pero en la práctica, decenas de conductores estacionaban sus vehículos allí diariamente ante la falta de plazas de aparcamiento en la zona. ... Se trataba, básicamente, de un aparcamiento «alegal» que el Ayuntamiento acaba de eliminar.
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Y lo ha hecho por la vía rápida, por cierto. A finales de la semana pasada se retiraron todos los vehículos estacionados y en apenas dos días de trabajo, cualquier vestigio de aparcamiento ha sido enterrado bajo toneladas de tierra.
Se trata, según explica el concejal de Obras Públicas, Miguel Balbás, de una intervención «rápida, barata, eficaz y eficiente», basada en la extensión de una capa de tierra que permita nivelar la zona y la colocación de bordillos que delimiten los carriles de circulación para evitar que los vehículos accedan a la zona como venía siendo habitual hasta ahora. Posteriormente, explica Balbás, se realizará un tratamiento de recuperación medioambiental para homogeneizar la imagen del entorno.
En todo caso, desde el Ayuntamiento asumen que la eliminación de ese aparcamiento generará quejas entre los vecinos. «Asumimos que va a pasar, pero ese aparcamiento no era legal y no podía mantenerse así, en una zona como esa», en pleno Casto Histórico, a los pies de la muralla y del arco de San Esteban. «Al final, había que tomar una decisión y la hemos tomado», zanja Balbás.
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