Primera toma de contacto con Ryanair para recuperar los vuelos comerciales en Burgos

Por ese motivo, Vicente Marañón ha mantenido este martes un encuentro con los responsables de Ryanair. Ha sido un «primer contacto», admite el presidente de Promueve Burgos. «Querían conocer la ciudad y nuestras aspiraciones», explica, así que se han aportado datos económicos, turísticos, industriales, de población y todo aquello que pueda necesitar la compañía para hacerse una idea de las oportunidades que ofrece Burgos.

Marañón apunta que no se ha hablado de rutas, ni de vuelos, ni de lo que busca Promueve, que no es otra cosa que una ruta regular, con destinos nacionales e internacionales, que permita consolidar el Aeropuerto de Burgos. «Volveremos a hablar en unas semanas», asegura el presidente, quien insiste en que Ryanair «vuela desde Valladolid y Vitoria, a ver si encajamos».

Así que mientras se abre una vía de comunicación con Ryanair no se avanza en las otras opciones que hay sobre la mesa de Promueve Burgos para reactivar el aeropuerto. Son varias las empresas que han mostrado su interés por volar desde la capital (después del 'no' de Air France), si bien presentan realidades muy diversas y no todas encajan en los planteamientos de la sociedad de promoción.

Además de Ryanair, en una posición aventajada está la portuguesa Sevenair, que podría utilizar Burgos como base de operaciones para entrar en el mercado español, asentando aquí un avión con su tripulación, para lo cual tendría que hacer una importante inversión, pues cuenta con aviones muy pequeños, sin presurizar, ruidosos y lentos. Es una opción a estudiar cuando Sevenair presente una propuesta concreta.

Hasta Promueve Burgos han llegado otros dos inversores españoles, que cuentan con aviones pero que no con compañía, comercializadora ni distribuidora, y la propuesta de una compañía de Mallorca, Uep Fly, que podría también usar el aeropuerto para conexiones, de las que se beneficiaría Burgos. Y todo ello sin olvidar Air Nostrum, que sigue interesada en la ciudad.

La decisión del consejo de administración de Promueve Burgos de no prorrogar el contrato con la filial de Iberia no les ha desanimado y, además de ofrecer volver en las mismas condiciones que estaban (lo que les permitirá retomar actividad de manera inmediata), mantienen la última propuesta que hicieron el pasado octubre. Suponía mejorar horarios y frecuencias, pero no lo suficiente para los intereses de Promueve.

Una vez analizadas todas la opciones, Promueve Burgos tendrá que decidir si saca el nuevo contrato (para el que se han reservado 900.000 euros este 2022) o si espera a futuras oportunidades. En el primer caso, la intención sería poder contar con nuevos operativos ya de cara al verano, aunque tampoco se descartan vuelos estivales si para entonces no se ha reactivado el aeropuerto.