Las obras de la Plaza de Santiago, en plazo

Así, y aunque todo dependerá de las posibles eventualidades que pudieran ir surgiendo en los próximos meses, el Ayuntamiento confía en que los trabajos finalicen a principios de verano, tal y como estaba previsto en el proyecto. Un proyecto ideado, fundamentalmente, para atajar las goteras y humedades que se venían registrando en el aparcamiento subterráneo casi desde el primer día.

De hecho, esas deficiencias motivaron la presentación de denuncias por parte de los propietarios de las plazas y los vecinos, que acabaron obligando al Ayuntamiento, promotor inicial de la obra, a volver a actuar. Así, el principal objetivo de los trabajos pasa por arreglar los desperfectos causados hasta la fecha y, sobre todo, garantizar que no se vuelvan a repetir. Para ello, el proyecto plantea un cambio de concepto en el desaguado de la lluvia, que anteriormente se dirigía hasta el centro de la plaza, para dirigirlo hacia el perímetro.

En este sentido, Garabito ha reconocido que inicialmente había ciertas dudas en torno a la idoneidad de la propuestas técnica, pero tras levantar el antiguo pavimento y analizar la estructura se ha «comprobado» que la solución aportada es la adecuada. Eso sí, una vez en el terreno se ha decidido «variar el orden de algunas de las capas» del suelo de la plaza.

También ha habido polémica sobre la colocación y ubicación de las casetas de obra. Unas casetas que, según ha destacado el concejal, no se van a mover de su ubicación actual, que se considera la más adecuada.