Mujeres con historia, burgalesa

Si la historia de una guerra es la del bando vencedor, la historia, en letras capitales, la han escrito los hombres. Pero ellos no siempre han sido los protagonistas. Con 'Burgos en femenino', la asociación pretende dar a conocer a mujeres que han sido parte importante en la vida burgalesa, ofreciendo un recorrido alternativo (y muy divertido) por la ciudad, y que arranca en el Arco de Santa María.

Venus y Juno custodian la entrada, dos diosas que, según algunas tradiciones, homenajean a Margarita de Austria. La esposa de Felipe III, a la que le hubiera gustado ser monja, no pasó por Burgos pero sí que tuvo conexiones con la ciudad. Y es que su primogénita, Ana Mauricia, se casó con Luis XIII de Francia en la Catedral. ¿De qué les suena la Mauri? Pues... de 'Los tres mosqueteros' de Dumas y de la película 'El hombre de la máscara de hierro', ni más ni menos.

La Seo burgalesa ha sido testigo de grandes bodas, comenzando por la de Fernando III El Santo y Beatriz de Suabia, para cuyo enlace se construyó la actual Catedral hace casi ocho siglos. Y también en la joya del gótico contrajeron nupcias el hijo de los Reyes Católicos, Juan, con Margarita de Austria, una pareja excesivamente enamorada para los estándares de la época.

Y qué decir de Isabel... Sí, hombre, Fadrique de Basilea, una de las primeras mujeres que se dedicó al arte de la imprenta, aprendiendo el oficio en el mismo taller del que salió 'La Celestina'. Esta ruta 'Burgos en femenino' nos llevará también a conocer a Mencía de Mendoza, Condestable de Castilla, una mujer que opuso su inteligencia a la fuerza de su marido. Y a las abadesas del Monasterio de las Huelgas Reales, todas ellas de alta cuna, entre las que destacaríamos Teresa de Cartagena. Escritora mística, denostada por sus contemporáneos, y que defendió que las mujeres pueden tener la misma capacidad intelectual que los hombres. Vamos, una abanderada del feminismo.

Las amantes reales, con Isabel Osorio, la 'puta' de Felipe II, y 'mujeres enamoradas', vamos las meretrices de toda la vida, copan otro capítulo de una ruta en la que también tiene cabida Santa Teresa de Jesús. La mística residió en Burgos, dejó su huella en el Convento de San José y Santa Ana, el último que fundaría, y era considerada una mujer «sospechosa». Sabía leer y escribir, y no le gustaba nada esa manía de la sociedad del momento de recibir la llegada de una hija como si fuera casi un castigo divino.

Las escritoras María Teresa León y María Cruz Ebro, autora esta última de 'Memorias de una burgalesa', nos acercan a la Plaza Mayor; y de ahí al Teatro Principal y la Sala Polisón, inspirados en la moda de los polisones femeninos de finales del siglo XIX. En toda ruta que se precie, la presencia de El Cid Campeador es ineludible; sin embargo, la presente Rodrigo Díaz de Vivar cederá el testigo a su esposa, Doña Jimena.

La Casa del Cordón cierra este recorrido por la historia, la cultura y el patrimonio burgalés, contándolos las anécdotas de Isabel La Católica y su hija Juana La Loca. La Católica consiguió cambiar las normas de los cartujos para que las reinas, y solo ellas, pudieran entrar en la Cartuja de Miraflores después de forzarles a sacar el féretro de su padre, para rezarle, ante la probición de que las mujeres entrasen en el edificio religioso.

'Burgos en femenino', proyecto liderado por Almudena Vicario y Noelia Alonso, se podrá disfrutar como una ruta fija más dentro de la programación que ofrece la Asociación de Guías Turísticos de Burgos. Eso sí, tras la inauguración oficial, se han programado dos citas para el sábado y el domingo, a las 12:00. A patir de ahí, bajo demanda, como todo lo que hacen los guías burgaleses.