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Vicente Marañón ha roto su silencio. El portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Burgos, y vicealcalde de la ciudad, no había querido entrar a valorar la decisión de la formación naranja de escoger a Rosario Pérez Pardo como cabeza de lista para las ... elecciones municipales. Sin embargo, conocer que ha sido objeto de «descalificaciones» y «difamaciones» de tapadillo le ha hecho salir a defenderse.
Marañón ha defendido su gestión como portavoz de Cs durante estos cuatro años. «He cumplido con las instrucciones del partido», que pasaban por «conseguir la Alcaldía de Burgos; era un pacto que yo no negocié, se decidió en Valladolid y Madrid«, ha recordado. »Como militante, intenté hacer realidad los planes de Cs para consolidar el proyecto en Burgos«.
«He vivido momentos muy duros, que no se los deseo a nadie», ha insistido, al mismo tiempo que ha reconocido que «se ha encontrado muy solo». Una soledad que, además, ahora está comprobando que venía acompañada de «descalificaciones» y «difamaciones» expresadas por sus compañeros de grupo municipal, que desconocía.
Vicente Marañón habla de un «libero que circuló por el partido» y que recogía «difamaciones sobre mí»; un documento de 2019 firmado por los entonces cuatro concejales de Cs (Rosario Pérez Pardo, Miguel Balbás, Julio Rodríguez Vigil y Rosa Niño), en el que le critacaban duramente y pedían que se le retirase la condición de portavoz.
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«No comparto ninguna de las descalificaciones que he leído y que se han sostenido en el tiempo», mucho más allá de 2019, ha matizado. Las desconocía hasta ahora y, además de asegurar que son «completamente infundadas», como no se las han dicho a la cara, afirma haber estado «indefenso», sin «poder rebatirlas».
Lo hace en estos momentos, aunque sin atacar a sus compañeros concejales. «No voy a decir ni una sola mala palabra de mis compañeros; nunca lo he hecho», ha afirmado. Pero sí ha admitido que «al finalizar este mandato, no continuará en Cs». Cumplirá con el mandato de los vecinos de Burgos, pero a partir de mayo se irá.
«Me presenté hace cuatro años, me eligieron para una misión y la voy a cumplir. Yo sí soy una persona leal», pero una vez cumplido el mandato, se «desvinculará» del partido. Eso sí, Vicente Marañón critica que Cs haya «premiado» este tipo de comportamientos. «La lealtad es esencial y debe ser reconocida; cuando no es así, yo no puedo estar en una organización de este tipo», ha concluido.
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