Se inician los trabajos preliminares para acabar con los hundimientos en Reyes Católicos

Entre el lunes y el martes está previsto que un georradar multifrecuencia recorra la zona, tanto la vallada por seguridad como el entorno, para localizar cavidades y corrientes subterráneas. El objetivo de esta intervención inicial es, según explica el concejal de Vías y Obras, Miguel Balbás, determinar en qué puntos concretos deben realizarse las catas posteriores.

Se trata de «arrojar luz sobre el estado de la infraestructura y las razones del problema al que nos enfrentamos, de tal forma que se pueda ejecutar una solución definitiva al mismo». Los técnicos municipales han indicado que el problema derivaría de un paleocauce del Vena, que estuviera socavando el suelo y provocando este hundimiento que, en algunas zonas alcanza los 30 centímetros de profundidad.

Con la recopilación de esta información se dan los primeros pasos del estudio geotécnico, geológico e hidrológico que el Ayuntamiento ha incluido en el contrato de redacción del proyecto de reparación, apunta Balbás. Cabe recordar que la adjudicación de la redacción del proyecto a la empresa Consulteco se produjo el pasado 18 de agosto por un importe de 28.000 euros, que supuso una rebaja del 20% respecto al presupuesto de licitación.

Tras la firma del contrato, el plazo para ejecutar el trabajo es de cuatro meses y una vez culminado comenzarán los trámites para licitar y adjudicar la ejecución de las obras de reparación, que podrían iniciarse en los primeros meses de 2022.

Desde el Ayuntamiento de Burgos han intentado acelerar al máximo los plazos para acometer unas obras que son urgentes, dado el riesgo que se corre de un agravamiento de los hundimientos. De hecho, en el mes de febrero se tomó la decisión de reducir a 20 km/h la velocidad máxima de circulación en la zona y, días más tarde, se cerró el carril izquierdo (sentido centro), el más afectado.