El HUBU perfecciona el tratamiento de la disfagia

Este departamento se creó en el HUBU a finales del 2019, y en él participan enfermeras, otorrinos, endocrinos, nutricionistas, rehabilitadores, intensivistas, radiólogos, neurólogos, neumólogos, digestivos y pediatras, además de estas dos logopedas, siendo una unidad multidisciplinar para el diagnóstico y tratamiento de la disfagia orofaringea.

La identificación precoz de los pacientes con riesgo de aspiración es clave, puesto que su prevención puede suponer una reducción en la morbilidad de los pacientes. Es importante la detección de los principales signos de alarma que indican que el paciente pueda tener dificultades en este proceso, como pueden ser, entre otros: dejar de comer, pierde peso, tose frecuentemente durante la comida, cambio de voz después de tragar, aumenta el tiempo necesario para tragar, se atraganta, posee infecciones respiratorias frecuentes sin una causa conocida, odinofagia o dolor al tragar, restos orales de alimento.

«El objetivo primordial ante un paciente con disfagia orofaríngea es conseguir una alimentación oral con una deglución segura y eficaz, existiendo múltiples enfoques terapéuticos en función de la alteración deglutoria del paciente. Cuando esto no es posible, el objetivo será el restablecimiento y mantenimiento del estado nutricional, así como la prevención del desarrollo de complicaciones, para lo cual, puede ser necesario buscar vías de nutrición alternativas a la natural con carácter temporal o definitivo. Gran parte de las alteraciones de la deglución son susceptibles de mejora o remisión, siempre que la evaluación sea precisa, con un plan rehabilitador específico y adaptado al paciente. En el Hospital estamos muy contentos de poder contar con estas dos nuevas incorporaciones, han llegado con muchas ganas y han mostrado pasión y esfuerzo desde el primer día», detalla la Dra. Ana Navazo, jefa del servicio de otorrinolaringología.

Así, fisioterapeutas y logopedas son fundamentales para valorar la estructura, el tono, la movilidad y la sensibilidad de los músculos implicados en este proceso, además de su funcionamiento durante la deglución. Uno de sus cometidos es aportar diferentes medidas y métodos restitutivos, compensadores y/o adaptativos, así como estrategias de estimulación de la musculatura y mejora del tono, debiendo realizar un tratamiento individualizado a cada paciente, y posterior revisión. En el caso del HUBU, desde su llegada, las dos nuevas logopedas han tratado a unos cinco pacientes semanales en la UCI. Estos, aproximadamente, necesitan de media 2-3 meses de tratamiento. Por poner en contexto, entre marzo del 2020 y abril 2022 se valoraron 316 pacientes, algunos de ellos pertenecientes a múltiples estudios. De estos, precisaron rehabilitación, con logopedas externos, un total de 40 (12 mujeres y 28 hombres).

Este martes, 12 de diciembre, se celebra el Día Mundial de la Disfagia, que tiene por objetivo dar a conocer un trastorno que afecta a un porcentaje importante de la población.

La disfagia es el término que se utiliza para describir los trastornos de la deglución, con problemas para comer o tragar los alimentos (sólidos y /o líquidos e incluso en ocasiones la propia saliva), desde la entrada de alimento en la boca hasta la llegada de este al estómago.