Los fondos europeos impulsan la rehabilitación de fachadas en los edificios de Burgos

Así, según los datos que maneja el Colegio Oficial de Arquitectos de Burgos, a lo largo del pasado ejercicio se visaron obras que afectan a 777 viviendas a lo largo y ancho de la provincia en esta materia.

En este sentido, desde el Colegio reconocen que es complicado conocer el número concreto de proyectos tramitados, toda vez que eso depende de las administraciones públicas, y la casuística de cada uno de esos proyectos es muy diferente. Así, se tiene conocimiento de actuaciones en comunidades de vecinos de varias decenas de viviendas y en otras con apenas un puñado de domicilios.

Sea como fuere, la estadística no engaña, y a lo largo del pasado ejercicio se tramitaron proyectos que afectan a casi el doble de viviendas que en 2022, cuando se registraron actuaciones en 400 viviendas. Prácticamente se ha duplicado.

Sin duda, la inyección de fondos europeos en este sentido es clave en el significativo aumento de los proyectos. Sin embargo, desde el Colegio puntualizan que Burgos era ya una provincia especialmente «sensible» a actuaciones de mejora energética previamente. A este respecto, inciden, proyectos como el desarrollado años atrás en las torres de Río Vena son el ejemplo perfecto.

Sea como fuere, lo cierto es que el impulso registrado en los últimos meses es más que evidente, sea cual sea el perfil del proyecto. «Lo ideal es actuar sobre la envolvente y sobre la carpintería interior», pero cada caso es diferente y no en todas las comunidades se puede llevar a cabo dichas actuaciones, ya sea por una cuestión técnica o económica. Y es que, aunque la inmensa mayoría de los proyectos de mejora de la eficiencia energética son susceptibles de recibir ayuda económica y de que su ejecución permite reducir a medio y largo plazo las facturas de calefacción, lo cierto es que las actuaciones de este tipo no son baratas.

Según los cálculos del Colegio, solo la ejecución material de la envolvente del edificio se dispara a «un mínimo» de 150 euros el metro cuadrado. De ahí para arriba, teniendo en cuenta que se habitualmente se trata de reformas que incluyen muchas otras actuaciones y que existen diferentes calidades materiales. De hecho, nada tiene que ver el sistema SATE y el de fachada ventilada, las dos principales opciones que se reparten casi a partes iguales a lo largo y ancho de la provincia.

En todo caso, la proliferación de obras en envolvente ha supuesto sin duda una enorme inyección de trabajo al sector de la construcción, que de un tiempo a esta parte, sobre todo tras la pandemia, está pivotando parte de su rendimiento en torno a la rehabilitación.

Habrá que ver cómo evoluciona el sector a partir de ahora, ya que aunque todavía hay muchos proyectos visados que no han comenzado a ejecutarse, la convocatoria de ayudas por parte de los fondos europeos finalizó el pasado 31 de diciembre. Por el momento se desconoce si habrá algún tipo de convocatoria este año.