El Festival de Folclore regresa a Burgos apretándose el cinturón

En esta ocasión serán cuatro las agrupaciones folclóricas llegadas desde fuera de nuestras fronteras: Compañía de Danza Acuarela (Bolivia), Compañía de Danza y Música Étnica Komenka (Estados Unidos), Compañía Folclórica de Canciones y Danza de la Escuela de Economía de Varsovia (Polonia) y el grupo Netos de Bandim (Guinea Bissau). A todas ellas se les sumará la Asociación Cultural Abul-Beka de Ronda (Málaga), amén de otras ocho agrupaciones locales.

Se trata de la menor cifra de participantes de fuera de Burgos de los últimos años, una circunstancia que responde, según ha subrayado Peñacoba, a las limitaciones presupuestarias y las dificultades administrativas que ha tenido que superar el festival. Unas dificultades que se dejarán sentir también en otros aspectos, como el propio escenario, que pasará de ser «el mejor escenario folclórico de Europa» a ser «infitinamente más modesto».

Asimismo, toda la actividad del festival se centrará en esta ocasión en el entorno de la plaza de San Juan y del propio monasterio, incluidos los talleres de baile y música, que tradicionalmente se llevaban a cabo en El Espolón y que en esta ocasión se celebrarán en menor formato.

En total, el festival contará este año con un presupuesto de 120.000 euros, en vez de los 180.000 euros habituales. Y eso a pesar del «esfuerzo» realizado por el Ayuntamiento para mantener con vida el festival. Y es que, según ha explicado la concejala de Cultura, Charo Pérez, este año se ha tenido que cambiar el modelo de contrato para la organización y se han tenido que solventar numerosos problemas burocráticos que «venían de atrás».

Aún con todo, tanto Peñacoba como Pérez confían en que la edición del festival de folclore de este año vuelva a ser un éxito de público, algo a lo que sin duda ayudará el buen tiempo que se espera, algo muy poco habitual en estas circunstancias.

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