El entrenador de Burgos acusado de corrupción y abuso sexual de menores acepta 111 años de prisión

A.D.P., de 31 años, en prisión provisional desde el pasado noviembre de 2021, ha reconocido todos los hechos que se le imputaban en el juicio celebrado este viernes a puerta cerrada, tras lo que su abogado ha llegado a un acuerdo con el Ministerio Público por el cuál se le rebajan 30 años del total de la pena pedida en el escrito previo.

En concreto, esta disminución se ha producido por la reducción de siete a cinco años de prisión en cada uno de los delitos de corrupción de menores, manteniéndose el resto de penas de abuso sexual a menores de 16 años y posesión de pornografía infantil, así como las indeminizaciones previstas igualmente por el Ministerio Público.

Los hechos ocurrieron en 2020, cuando el hombre, que dirigía un equipo dentro de un club burgalés de baloncesto, creó un perfil falso en Instagram haciéndose pasar por una chica y, según consta en el escrito de calificación de Fiscalía, contacto a través del mismo con algunos de los menores a los que entrenaba.

Así, fue ganándose poco a poco su confianza y engañándoles para conseguir imágenes íntimas para lo que el inculpado les remitía fotos suyas de alto contenido sexual de una joven. El Ministerio Público relata incluso que se llegó a producir sexo virtual a través de videollamadas con alguno de ellos, hechos por los que se le imputaron los dos delitos de abuso sexual a menores de 16 años.

De esta forma, el entrenador consiguió embaucar a un total de 23 menores de edad entre 2020 y 2021 para que le enviasen por privado fotos y vídeos de carácter explícitamente sexual, unos hechos que han sido reconocidos por el acusado durante la vista celebrada en la Audiencia Provincial de Burgos.

La denuncia de los padres de uno de ellos activó la investigación y, tras la detención del hombre en noviembre de 2021, el registro domiciliario reveló numeroso contenido audiovisual de los menores almacenado en diferentes equipos informáticos.

De esta manera, después de que su representado confirmase la autoría de todos estos hechos, el letrado de A.D.P. ha aceptado los 111 años y 4 meses solicitados por la Fiscalía, una pena que quedará en cualquier caso en 20 años, período máximo de estancia en prisión para este tipo de casos.

Además, tras la sentencia en firme que se dará a conocer en los próximos días, el abogado de la defensa aún podría solicitar la Triple Mayor, un método penal de reducción de condena por el que se establece que un reo no puede permanecer en prisión por más tiempo que el triple del establecido para la condena más larga -en este caso 15 años- implicaría otros cinco años menos de cárcel para el exentrenador burgalés.