La lluvia no dio tregua hoy a la Semana Santa de Burgos y obligó a modificar lo previsto para esta jornada de Viernes Santo. Tras la suspensión ayer de la Procesión del Encuentro, otro de los momentos más representativos, el acto del Desenclavo de la ... Cruz no pudo celebrarse en la plaza de Santa María, al aire libre, y tuvo que llevarse a cabo, finalmente, en el altar mayor de la catedral.
Publicidad
De esta forma, al igual que ocurrió en 2021 debido a la situación sanitaria, la imagen del Santísimo Cristo de Burgos, a hombros de los miembros de la Cofradía de las Siete Palabras y del Santísimo Cristo de Burgos, y la talla de María Santísima de la Consolación, portada a hombros de la Cofradía de Nuestra Señora de la Misericordia y de la Esperanza, procesionaron por el interior del templo, hasta llegar al altar mayor, donde protagonizaron otro de los momentos más importantes de la Semana Santa burgalesa.
El acto central dio comienzo con el alzado de la cruz y la proclamación de las Siete Palabras de Cristo en la Cruz. Es en ese momento cuando los cofrades, poniendo especial atención y cuidado en la talla para evitar que se dañe, procedieron al desenclavo de la imagen del Santísimo Cristo de Burgos, para colocarlo después frente a la imagen de su madre.
Noticias relacionadas
Gabriel de la Iglesia
Un acto que representa el momento más triste de la Semana Santa, cuando la Virgen María recibe el cuerpo inerte de su hijo tras ser crucificado. El acto concluyó finalmente con un besapiés al Santísimo Cristo de Burgos de todas aquellas personas que quisieron acercarse hasta la talla.
Pese a las condiciones climatológicas, la ciudadanía burgalesa no quiso perderse este emotivo momento, y llenaron el aforo del altar mayor, así como las naves próximas, para poder ver de cerca esta emotiva estampa. Tampoco quiso faltar a este evento la alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, que junto a otros miembros de la corporación municipal, estuvo presente también en el acto del Desenclavo de la Cruz, al igual que el arzobispo de Burgos, Mario Iceta, el deán de la Catedral, Félix José Castro y el delegado territorial de Burgos, Roberto Saiz.
Publicidad
El Acto del Desenclavo de la Cruz es uno de los más famosos del Viernes Santo en Burgos, no solo por el momento exacto que representa, sino también por la talla que lo protagoniza. El Santísimo Cristo de Burgos es una réplica realizada en el año 2014 y de gran tradición tanto en la ciudad de Burgos como fuera de ella, ya que también goza de gran devoción en Sevilla o Hispanoamérica.
Esta réplica, al igual que la talla original de principios del siglo XIV, goza de gran realismo, está forrada en piel de becerro y uñas naturales, y es articulada en cabeza, brazos y piernas. Su historia está llena de historia y leyendas, como la forma en la que llegó a Burgos, tras ser encontrada en el mar dentro de una urna, por un barco de mercaderes españoles o el impacto que tuvo en aquellos que la contemplaron. Uno de los más sonados es el protagonizado por la propia reina Isabel la Católica, que según la leyenda, en una visita al Santo Crucifijo, mandó quitar y conservar como reliquia un clavo de uno de los brazos del Cristo y al hacerlo el brazo cayó y esto impactó tanto a la reina que se desvaneció.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.