Primero fueron las denuncias por la presencia de cableado eléctrico en las fachadas de la Catedral de Burgos, el Arco de Santa María y la iglesia de la Real y Antigua de Gamonal. Ahora llegan tres nuevas denuncias por otra serie de actuaciones que, ... a juicio del palentino Alfredo Trigueros, atentan contra el patrimonio de la capital burgalesa. Y, entre ellas, la Catedral vuelve a estar implicada.
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Trigueros registró el pasado 31 de marzo, en la Delegación Territorial de la Junta en Palencia, un escrito destinado al Servicio Territorial de Cultura de Burgos en el que pide que se «depuren responsabilidades por los daños que hayan podido causar» las argollas que se han colgado en el dintel de la puerta principal de la portada de Santa María, la fachada principal de la Catedral de Burgos.
Se trata de unas escarpias que se han clavado, «perforando», las piedras que componen el dintel. Además, están colocadas en el interior de los correspondientes tacos de plástico, apunta Trigueros, de ahí que exige no solo que se retiren y se reparen los daños ocasionados, sino que se investigue por qué se han colocado y quién lo autorizado, teniendo en cuenta que la Catedral es un bien Patrimonio de la Humanidad.
Sin embargo, esta no es la única denuncia que ha registrado recientemente el palentino y que afecta a la Seo. Alfredo Trigueros también reclama que se reparen las réplicas de la Galería de los Reyes, que se colocaron hace dos décadas, ante la presencia de grietas en muchas de ellas. Incluso, una de las figuras se ha desplazado ligeramente, por lo que debería ser recolocada.
Y si hablamos de la fachada lateral de la Plaza del Rey San Fernando, Trigueros lamenta que se mantenga una pared de ladrillos dobles en el lugar en el que estuvo ubicado el antiguo palacio arzobispal. Ocasionan un «un daño estético», pues no encajan con el acabado en piedra de la Catedral, así que el denunciante reclama de nuevo que se retiren, en beneficio del bien patrimonial.
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La tercera denuncia realizada por Alfredo Trigueros vuelve a referirse a la presencia de cableado eléctrico en un bien protegido. En este caso se trata de la iglesia de San Esteban, Bien de Interés Cultural (BIC), que tanto en la fachad como en la cubierta presenta presencia de cableado, registros, focos e iluminación, algo que está prohibido por ley al tratarse de un edificio con protección.
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