Cuatro muertes tiñen de negro la primera quincena de julio en Burgos

No ha empezado bien el mes de julio en Burgos. Cuatro fallecidos han coloreado de negro la página del calendario con hechos que, por fortuna, no suelen ser usuales. En la tarde del sábado 1 de julio corría como la pólvora la noticia de que un hombre había sido detenido como presunto autor del asesinato de su pareja. Al siguiente día la autopsia confirmaba que la muerte se había producido por suicidio por ahorcamiento, pero se confirmaban también los traumatismos compatibles con golpes.

Los hechos, confirmados por la Policía Nacional, dejaban claro que el varón tenía antecedentes por violencia de género ejercida sobre otras parejas y que la mujer fallecida había sido ya víctima de violencia de género y estaba en el sistema Viogen. La mujer, de 20 años, había llamado al 112 sobre las 15:30 horas del sábado 1 de julio para avisar de que estaba teniendo problemas con su pareja. Un rato después fue el detenido el que llamó al teléfono de emergencias para requerir la presencia de la policía alegando que la mujer estaba muy nerviosa y se había encerrado en una habitación con un cuchillo.

Cuando llegaron los agentes solo pudieron confirmar que la mujer estaba muerta, el hombre alegó que se había ahorcado y que él había descolgado el cadáver. Tras los resultados de la autopsia el hombre fue puesto el libertad y el caso ha quedado en manos de la autoridad judicial.

El jueves 6 de julio la tranquilidad de Burgos se vio alterada de nuevo cuando al filo de las 10:56 la Policía Nacional tuvo que abatir a un atracador en la calle Condesa Mencía a la altura del 116 tras un intento de robo en la sucursal del banco Santander del G-3.

Después de recibir el aviso de que un hombre había accedido a la oficina bancaria, y de que había rociado con gasolina a una trabajadora, varias dotaciones de la policía se han personado en pocos minutos rodeando la sucursal. El hombre ha logrado sustraer el dinero de la entidad financiera y emprendió la huida por la calle Duque de Frías. Cuando la policía le dio el alto, el atracador se enfrentó y encañonó a los agentes policiales con el arma que portaba y los policías tuvieron que utilizar sus pistolas reglamentarias para repeler la intervención. Fruto de esta intervención el atracador fue herido en la zona del cuello y, aunque los servicios sanitarios llegaron con rapidez, no pudieron salvarle la vida.

El sábado 8 de julio se produjo una agresión en el asador Los Trillos, donde un cliente agredió con la pala del horno a un cocinero de 53 años. Una agresión que de haber sido un poco más abajo podría haber acabado en una desgracia, pues tas palas «cortan como un cuchillo». Fueron los clientes presentes en el restaurante y testigos de la agresión los que llamaron a los servicios de emergencias.

La Polícia Local y Nacional acudieron junto a una ambulancia al establecimiento, en la calle Don Juan de Austria, donde encontraron al cocinero sangrando con un corte diagonal que abarcaba la mitad de la cara, desde la oreja hasta los labios. Fue trasladado al Hospital Universitario de Burgos para recibir atención médica de inmediato en el servicio de emergencias. Ante la gravedad de la herida, le derivaron rápidamente a cirugía plástica para coser el corte con puntos en la parte interior de la boca y en la cara.

Una menor de edad perdió la vida el martes 12 de julio tras precipitarse desde una ventana en la plaza Avelino Antolín Toledano, en Gamonal, cerca de las piscinas de Capiscol. El suceso ocurrió poco antes de las 17:30 horas, cuando el 1-1-2 recibía una llamada alertando de que una joven se hallaba inconsciente en el suelo tras haberse caído desde una ventana del edificio.

Hasta allí se desplazaron dotaciones de Policía Nacional, Policía Local y una ambulancia de Sacyl, que solo pudo confirmar la muerte de la menor. La Policía investiga el suceso como un acto autolítico, descartando que se trate de una muerte violenta.

Un conductor de 25 años y vecino de Medina de Pomar falleció también el miércoles 12 de julio en una colisión frontal entre un turismo y una furgoneta en Espinosa de los Monteros. El suceso ocurrió a las 19:20 horas, cuando el 1-1-2 recibió una llamada alertando del accidente e indicando que había un hombre atrapado e inconsciente en el vehículo.

El siniestro tuvo lugar en el kilómetro 4 de la BU-542. Hasta allí se desplazó la Guardia Civil, una ambulancia de soporte vital básico y una UVI móvil. Además, el equipo médico de Espinosa y los Bomberos de Burgos para excarcelar al varón atrapado.

Sin embargo, no pudieron hacer nada por salvar la vida de D.S.R. de 25 años y vecino de Medina de Pomar, que falleció. El otro conductor, de mediana edad, resultó herido grave y trasladado al hospital.

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