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La congregación de Hermanas del Niño Jesús ha cedido la titularidad del colegio que lleva su mismo nombre a la Fundación EDUCERE, alegando «falta de relevo generacional». A partir del curso 2018/19, será esta fundación, perteneciente a la Federación Española ... de Religiosos de Enseñanza (FERE), la que asuma íntegramente su gestión. Esta información ha sido comunicada a los padres de los alumnos del centro, a los que se les ha querido tranquilizar, asegurando que el cambio de titularidad del centro no conllevará novedades sustanciales, ya que la aprobación de la cesión por parte de la congregación Nicolás Barré estaba supeditada al respeto por su actual modelo educativo. No obstante, las actuales gestoras han tenido varios «pretendientes» y se han decantado por EDUCERE al entender que serán ellos los que implemente una gestión más similar a la suya propia.
Sorprende que esta situación se dé sólo tres años después de que el colegio se trasladase a unas nuevas instalaciones en el barrio de Parralillos. No obstante, esa falta de relevo generacional ha sido la causante de que se buscase otra entidad que asumiese la titularidad del centro. Esa entidad es la Fundación EDUCERE, creada en 2010 por la FERE, para asumir la titularidad de los centros docentes católicos que se encuentren en dificultades para su continuidad en el noroeste de España. Y parece que su nacimiento era necesario ya que esta fundación posee actualmente catorce centros, en las comunidades de Galicia, Asturias, Cantabria y Castilla y León. En esta última, EDUCERE posee cinco colegios: Sagrada Familia (Miranda de Ebro), Santo Ángel (Palencia), Virgen de la Peña (Bembibre), Virgen de la Vega (Benavente) y Virgen Blanca (León).
Aceptada la negociación con EDUCERE, las Hermanas del Niño Jesús han mantenido diversas reuniones a lo largo de esta semana, dando a conocer este importante cambio en la gestión del centro, tanto a los docentes, como a los padres de los alumnos. A estos últimos se les ha emplazado a una nueva reunión, en la que se tratará las pretensiones económicas que fije el nuevo dueño, que podría pasar por una modificación de las cuotas mensuales que pagan los tutores por cada alumno. De hecho, para evaluar el estado de las cuentas del colegio se ha realizado una auditoria, que será la que permita a la EDUCERE valorar si bajar, mantener o incrementar esa cuota. Esta reunión tendrá lugar en marzo, antes de tramitar la matrícula del próximo curso, de manera que los padres tengan capacidad para elegir si matricular o no a sus hijos.
Cabe recordar que el colegio Niño Jesús cuenta con más de 700 alumnos, que van desde guardería hasta Bachillerato. Además, se trata de un centro histórico que nació en 1891 y que, tras 127 años de docencia, cede el relevo a un nuevo titular del que esperan que «conserve su ideario y mantenga el estilo de educar que caracteriza al centro», han sentenciado.
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