Conductores de autobús de Burgos exigen una bajada de la edad de jubilación

En la actualidad, la edad de jubilación para el colectivo de conductores de transporte es de 67 años, una edad que supone un peligro al trabajar como conductor tanto para él mismo como para los pasajeros, explican los trabajadores movilizados. Por consiguiente, buscan que se rebaje la edad de jubilación a los 60 años.

Así lo reivindica Pedro Garrido, conductor que coordina con el sidicato Confederación General del Trabajo (CGT) en Burgos la plataforma para la exigencia al Gobierno de coeficientes reductores para el sector del transporte, que buscan que apliquen Real Decreto Ley 1698/2011.

«Las actividades laborales de los trabajadores del sector urbano e interurbano y transporte de mercancías por carretera requieren esfuerzo físico y psíquico», asegura Garrido. Incluso, hay bajas de forma frecuente y «tienen un elevado ínidice de mortalidad».

Además, el citado Real Decreto se ha aplicado en determinados sectores como la tauromaquia, la minería y la Policía Municipal. Sin embargo, «al sector de transportes se la ha obviado por los costes que supone», determina.

«Repercute en los trabajadores, pero también en los usuarios. Saber que ser conductor de autobús con más de 60 años será más difícil y tendremos menos reacción a un imprevisto. Supone un peligro para el usuario, como se ha visto en algunas ocasiones», destaca.

La huelga convocada en Autobuses Urbanos en Burgos ha tenido escaso seguimiento, según apuntan desde el servicio municipal. Se habían programado servicios mínimos (al 50 %) pero han salido casi con total normalidad todos los autobuses. Ha habido alguna incidencia puntual en refuerzos y alguna línea, pero solo han hecho huelga en el turno de mañana 4 de los 56 conductores en servicio.

Las movilizaciones continuarán en Madrid el 7 de junio, con una manifestación a nivel nacional. Continuarán en el caso de que el Gobierno «no se siente a negociar».