Cuando Concha Velasco protagonizó películas y participó de la vida social de Burgos

Y con al menos una película rodada en Burgos. 'Las bodas de Blanca' se rodó, recuerda el periodista Miguel Moreno, «en un chalet de la Castellana». Un joven Moreno, periodista por aquel entonces de La Voz de Castilla, había terminado su jornada de trabajo en la redacción del periódico que estaba en Reyes Católicos. «Siempre que había un espectáculo de teatro, un rodaje o algo que fuera extraordinario, salíamos a por la entrevista», recuerda Moreno.

El periodista recuerda que hablaron «de cosas de la vida cotidiana, de su trayectoria como actriz», Y que se desplazó hasta la zona más noble de la ciudad, «una casa en la que se rodó prácticamente todo el tiempo que pasaron en Burgos».

Concha Velasco en los años 70 aparecía ante la sociedad como una mujer «avanzada, feminista, vistiendo minifalda...». Pero ella quería dejar de lado esa imagen. Decía, confiesa Moreno: «Oye, que yo no soy feminista», usando también la guasa y la ironía, cuando el periodista se refería a su modo de ver la vida en una época, el final del franquismo y la leve apertura moral que se percibía en el verano del 75, a pocos meses de la muerte del dictador.

La película estaba dirigida por Francisco Regueiro y tomó como plató de rodaje la en diferentes ubicaciones más allá de la Castellana. El reparto era de lujo porque más allá de la polifacética Concha Velasco, el plantel de actores y actrices era de lo mejor de aquel verano del 75. Paco Rabal, Javier Escrivá, Isabel Garcés, José Calvo o Paula Gardoqui.

La vieja estación de la Renfe, los alrededores de la Catedral y lugares cercanos fueron escenarios en los que Concha Velasco y sus compañeros repartieron saludos y besos al aire a los burgaleses que se acercaron a ver estos ídolos de los 70 muy cerca.

Estaba previsto también realizar el rodaje en el interior de la Catedral, como relata en 'lacarregue.com' Miguel Calvo, pero el Cabildo de la Catedral y el arzobispo, Segundo García de Sierra, impidieron que se grabaran escenas de la película. El exceso de celo litúrgico de aquella jerarquía de la Iglesia de Burgos hizo que Regueiro se llevara a León la escena de la Catedral.

La película del paisano de Concha Velasco es un drama que cuenta la historia de Blanca, una mujer que abandona a José, que no podía tener hijos; en un sinfín de circunstancias, rehace su vida, se va a casar con Antonio, pero al pie del altar lo deja y en la estación de Burgos se encuentra con su primer novio, José. El papel de Blanca es el de Concha Velasco.

Miguel Moreno recuerda «todos los días había que llevar a La Voz un par de reportajes» y al terminar el trabajo aquel día y para aquel chalet de La Castellana que se fue. «Recuerdo que fue muy amable conmigo», recuerda, «como también lo era con todo el mundo». Iba con ciertas precauciones porque que Concha Velasco «atendiera a un periodista de un medio pequeño», de provincias, como era La Voz de Castilla, podía resultar pretencioso.

Sin embargo, la actriz fue muy cercana con Moreno, «muy simpática conmigo, confesaba». Los periódicos de la época solían fotografiar «al periodista con la protagonista, en este caso»; hoy se hace casi impensable en los medios actuales, pero en los años 70 era una práctica habitual en muchos periódicos «para reafirmar que el periodista había estado ahí».

Moreno ha tenido la oportunidad de entrevistar «a todas las grandes figuras» que había en España. Eso para un periódico pequeño como La Voz de Castilla «era muy importante, lucía muchísimo», apunta el periodista. Las nuevas formas de informarse han revolucionado el panorama informativo del planeta pero cuando se recupera la memoria -sin nostalgia – de ese pasado, como en este caso, se degusta con placer el sabor añejo de del papel prensa de entonces.

Una de las últimas veces que Concha Velasco ha estado en Burgos fue, como recuerda Luis Mariscal, en noviembre de 2014 interpretando 'Olivia y Eugenio' de Herbert Morote. Aceptó ser madrina del 30 aniversario de Down Burgos; Pero, por cuestiones de agenda y salud, finalmente no pudo asistir.