La Catedral de Burgos cumple con la Memoria Histórica y oculta la inscripción de Primo de Rivera

La composición muestra el texto 'Catedral de Santa María'', con letras individuales, en bronce, y con una altura de 40 centímetros. Cada letra lleva su propio soporte, con un total de 31 anclajes, pero no van pegadas a la piedra, para que el agua de lluvia se filtre entre ambas. Así, se cubre la inscripción aunque se seguirá viendo entre las letras, pues es la única forma de cumplir con la Ley de la Memoria Histórica, respentado la protección que ampara a la Catedral de Burgos.

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La intervención, que ha sido autorizada por la Comisión de Patrimonio de la Junta y cuenta con el visto bueno del Cabildo Metropolitano, ha sido financiada por el Ayuntamiento. Se han destinado 19.000 euros al proyecto, que ha incluido tanto el diseño de la solución técnica como la instalación de la composión, que luce ya en el lateral de la Puerta del Sarmental.

Allí se mantiene la lona colocada con motivo del VIII centenario de la Catedral de Burgos, con los logotipos de las empresas colaboradoras, de los medios de comunicación y de los patronos de honor de la fundación. Se instaló hace dos años y, durante este tiempo, ha servido para ocultar la inscripción de Primo de Rivera. Ahora, letras y lona convivirán en este año del centenario.