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El Ayuntamiento estudia la viabilidad de levantar un aparcamiento subterráneo en Las Corazas. GIT

El Casco Histórico Alto, pendiente de las catas para el aparcamiento en Corazas

La asociación de vecinos valora el proyecto del Ayuntamiento de Burgos para levantar un aparcamiento subterráneo, cuya ejecución dependerá de los restos arqueológicos que pudieran aparecer

Sábado, 20 de enero 2024, 09:26

La falta de aparcamiento continúa siendo uno de los grandes problemas del Casco Histórico Alto de Burgos. De hecho, lejos de solventarse, parece ir a más, a raíz de la eliminación tiempo atrás de un buen puñado de plazas en el aparcamiento improvisado junto a San Esteban ... y de otras actuaciones.

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Por eso, el equipo de Gobierno del Ayuntamiento puso meses atrás sobre la mesa la opción de construir un aparcamiento subterráneo junto a la calle Corazas, a los pies de la antigua muralla de la ciudad aprovechando el desnivel del entorno y el espacio ocupado ahora mismo por el pequeño aparcamiento en superficie acondicionado años atrás.

Sin embargo, el proyecto se encuentra ahora mismo en un estado muy embrionario. Ni siquiera se sabe a ciencia cierta si se podrá llevar a cabo, toda vez que se trata de una zona especialmente sensible de la ciudad desde el punto de vista patrimonial.

250 Plazas

Urbanismo calcula que se podrían adaptar unas 250 plazas en el aparcamiento subterráneo en la calle Corazas.

De momento, el concejal de Urbanismo, Juan Manuel Manso, recuerda que ya está en marcha el proceso de adjudicación del estudio arqueológico planteado para comprobar la viabilidad de desarrollar la actuación. Para ello, está previsto que en las próximas semanas puedan llevarse a cabo catas arqueológicas en la zona.

Inicialmente, insiste Manso, la documentación existente apunta a que los restos que pudiera haber en el subsuelo -que a buen seguro habrá-, no cuentan con una especial relevancia histórico artística. Sin embargo, hasta que no se abran las catas y se analice con detenimiento, no se puede dar por sentado nada. No sería la primera vez que una actuación de este tipo desentierra un legado histórico de gran valor.

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Así las cosas, el Ayuntamiento esperará a conocer el resultado de las catas para, de la mano del área de Patrimonio de la Junta de Castilla y León, se decida cómo proceder. Si se puede llevar a cabo la construcción del aparcamiento, bien, si no, Urbanismo maneja «otras posibles opciones» para intentar dotar al barrio de más plazas.

En este sentido, una vez analizados los posibles restos, también habrá que valorar el resto de aristas de un proyecto de cierta envergadura, toda vez que inicialmente se contemplan hasta tres plantas con alrededor de 250 plazas y eso no es barato ni rápido de construir.

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«Insuficiente»

Además, la ejecución de ese aparcamiento subterráneo no solucionaría per se los problemas que arrastra la zona en esta materia. Al menos así lo entienden desde la asociación de vecinos del Casco Histórico Alto, que celebran la apuesta municipal en este sentido, pero insisten en que 250 plazas «son insuficientes».

A este respecto, Francisco Bárcena, uno de los portavoces del colectivo vecinal, insiste en la necesidad de abordar el debate en torno al establecimiento de aparcamiento regulado en superficie, con el objetivo de dar preferencia a los vecinos. Meses atrás, se decidió desarrollar una consulta popular en el barrio para valorar esta opción, pero de momento no se ha llevado a cabo.

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Lo que sí se ha conseguido, recuerda Bárcena, es paralizar el proyecto planteado el mandato anterior en la Subida de San Miguel y las calles Tahonas, San Miguel, Consulado y Camino del Gallego. Un proyecto que, a grandes rasgos, pretendía mejorar la accesibilidad de todo ese entorno a costa de perder un buen puñado de plazas de aparcamiento en superficie, algo que a juicio de la asociación era un mal planteamiento.

En este sentido, abunda Bárcena, «cuando se hace algo sin consultar con los vecinos, suele salir mal». De hecho, el principal requerimiento de la asociación no es otro que información y contacto directo con el ayuntamiento. «Hemos pedido una reunión» para abordar los problemas de aparcamiento y otras cuestiones, como la accesibilidad, el vandalismo, o la afectación que tendrá la implantación de la Zona de Bajas Emisiones, señala el portavoz.

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