Burgos retira de la calle más de 60 vehículos anualmente, algunos llevan abandonados más de un año

La cifra de coches abandonados en Burgos se mantiene año tras año. En 2023 fueron 64 los vehículos que la Policía Local registraba como abandonados. Sin embargo, a otros se les pone la pegatina pero no son trasladados al depósito, a pesar de llevar un año aparcados en el mismo sitio.

La instrucción VEH 2022/06 de la Dirección General de Tráfico establece que un vehículo está abandonado «cuando permanece estacionado por un período superior a un mes en el mismo lugar y presenta desperfectos que hagan imposible su desplazamiento por sus propios medios o le falten las placas de matrícula».

Cuando ese momento llega, la Policía Local pone una pegatina al coche, moto, camión... mediante el que avisa al propietario de que «si en el plazo de un mes contado a partir del día [se inserta el necesario] no ha sido retirado por el interesado, recordando que el plazo reglamentario desde su depósito será considerado como residuo doméstico».

En el caso de Burgos, la Policía Local retiró en 2023 64 vehículos abandonados. Esta es una cifra similar a la de 2022, cuando se llevaron al depósito municipal 63 automóviles. En este gráfico se puede ver la evolución de coches abandonados desde 2017:

Como se observa en el gráfico, la cifra de vehículos retirados de la vía pública en Burgos tuvo dos picos en 2017, con 147, y en 2021 con 167. Sin embargo, se contempla que durante el año del confinamiento por la pandemia de covid-19, en 2020, esta cifra cayó a mínimos históricos con 15 coches abandonados y trasladados al depósito municipal. Algunos de estos puede que sean robados.

En los dos últimos años, la cifra de coches retirados en Burgos por la Policía Local se ha estabilizado alrededor de los 63 vehículos. Sin embargo, si se compara con los años 2018 y 2019, estas cifras también estaban estabilizadas, pero con cifras más bajas. En 2018 se retiraron 38 vehículos de la vía pública; mientras que un año más tarde fueron 39.

Por otro lado, algunos coches abandonados de la ciudad de Burgos pasan años aparcados hasta que se retiran de las calles. Es el caso de un vehículo de la marca Peugeot aparcado en la calle Abad Maluenda, en el barrio de Los Vadillos. Lleva aparcado allí desde, al menos, junio de 2023 y presenta desperfectos.

En todo este tiempo, la Policía Local de Burgos ha colocado dos pegatinas de 'Vehículo abandonado' sobre él: una el 28 de agosto de 2023 y otra el 4 de abril de 2024. Sin embargo, y a pesar del plazo de un mes que hay para retirarlo de la vía, el coche sigue ahí aparcado.

Esta situación ha provocado el hartazgo de los vecinos de la calle y la zona, tensionada debido al bajo número de aparcamientos. Por ejemplo, si cada día en este espacio de Los Vadillos aparcaran entre uno y dos vehículos, en un año podrían haber aparcado unos 700 coches en este hueco. Por ello, los vecinos incluso han colocado dos carteles sobre el coche en los que se puede leer «Vehículo abandonado».

Cuando un vehículo llega a su vida útil, la Dirección General de Tráfico aconseja llevarlo a un desguace. Además, indica que desde allí se encargan de tramitar la baja definitiva del mismo, cuyo trámite es gratuito. Asimismo, desde algunos desguaces ofrecen el servicio de retirada de forma también gratuita y luego abonan al cliente un pago dependiendo del modelo y las piezas aprovechables.

Sin embargo, si es la Policía Local la que lleva un vehículo al depósito municipal, este traslado sí tiene un coste. Por ejemplo, la retirada y arrastre de motocicletas y ciclomotores es de 46 euros. El de turismos y remolques, 67 euros y el de furgonetas, 78. En el caso de camiones de hasta 3.500 kilogramos, la persona titular debería pagar 505 euros y, si superan este peso, 617 euros. Esta última tarifa se repite para autobuses.

Una vez en el depósito municipal, el precio se incrementa por la permanencia del vehículo en el lugar. Por cada día, hasta el octavo, son 9,50 euros. Desde el noveno día hasta el 30º, el pago total es de 204 euros. Del día 31 al 60 el pago es de 303 euros, y del 61 al 90, 404 euros. Si el vehículo se mantiene en el depósito municipal de Burgos durante más de 91 días, «siempre que el vehículo no hubiere sido adjudicado a un gestor de residuos sólidos urbanos», será de 505 euros.

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