Burgos envía un cargamento de más de 2.000 kilos de ayuda para Ucrania

La ONG Ven con nosotros, que surgió en 1995 para ayudar a niños de Chernóbil, trayéndolos de vacaciones a España, ha puesto en marcha una acción con el gobierno ucraniano y va a traer a 50 niños de Ucrania para que pasen unos meses en nuestro país. Llegarán este fin de semana a Madrid y, de ahí, se irán a cada familia de acogida ya definida.

A continuación, el autobús que les ha traído regresará a Ucrania, vacío, solo con los dos conductores y las dos tutoras que acomañana a los menores. Y Ven con nosotros pensó que era la oportunidad perfecta para enviar un cargamento de ayuda en la bogeda del autobús. Y se pusieron en contacto con la asociación burgalesa Familias con Ucrania.

Fue a través de Fidel Sancho, del Estanco Sancho de Gamonal, que la ONG contactó Nadiya Chmyr y Nacho Alonso (Familias con Ucrania) y lo hizo de la mano de José Miguel Martínez de Lecea, uno de los impulsores de las recogidas de ayuda en Fuentecillas (las primeras que se hicieron nada más iniciarse la invasión rusa).

Se ha contado con la colaboración de Master Chess Escuela de Ajedrez y el colegio Blanca de Castilla, que junto con el estanco han recogido las donaciones de los burgaleses. Mientras, Familias con Ucrania ha contactado con Ucrania Rioja, que ha donado mucho material sanitario. Y Fernando Villanueva ha cedido un local para almacenarlo.

Hay comida no perecedera como pasta, arroz o legumbres, explica Nacho Alonso; también pastillas de caldo, que sirven para preparar una comida muy nutritiva de manera sencilla y en cualquier situación. Igualmente va mucho material sanitario: antisépticos, desinfectantes, bstas de quirófano, EPI's....

Todo ello se ha empaquetado y mandado este martes a Madrid, donde esperará la llegada del autobús para, el fin de semana, partir a Ucrania. Irá a Chernigiv, de donde proceden los niños, y allí se distribuirá entre ucranianos y el hospital de la zona, con el que han contactado las dos monitoras, explica Alonso.

Se ha conseguido recoger más de 2.000 kilos de ayuda, por encima de lo que tenían previsto, así que Alonso agradece la colaboración a todos los que se han implicado. Si en el autobús no entran todas las cajas, se quedarán en Madrid, en un colegio, a la espera de una segunda oportunidad en Navidad, cuando vengan otros niños.

Nacho Alonso insiste en la importancia de seguir ayudando a Ucrania, pues la guerra continúa y, ahora, vive uno de los peores momentos. El combate se ha recrudecido y las necesidades de la población se acentúan. «Los ucranianos siguen necesitando apoyo para defender sus casas, su tierra y su familia; siguen resistiendo y luchando para ser libre».