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Burgos es ahora mismo una ciudad en obras. Ya sea por aquello de la cercanía de las elecciones o por los propios tiempos de tramitación administrativa, lo cierto es que ahora mismo conviven en la capital provincial una veintena de obras impulsadas por parte del ... Ayuntamiento. Cada una maneja sus propios plazos, y mientras unas podrían concluir antes de que acabe el actual mandato, otras prolongarán su ejecución más allá del verano.
En este sentido, y más allá de numerosas intervenciones menores, buena parte de los trabajos se centran en la reurbanización, peatonalización y reforma de espacios públicos, en muchos casos ubicados en Gamonal.
Allí se concentran cuatro de las obras de las que mas ha hablado el equipo de Gobierno a lo largo del mandato que está a punto de caducar. Se trata de la reurbanización del aparcamiento disuasorio de Las Torres y de las peatonalizaciones de la Plaza Lavaderos, la calle Roma y la calle Francisco Grandmontagne.
La primera intervención, adjudicada por 843.000 euros, fue la primera en arrancar y está cerca de concluir. Esta misma semana, los operarios de Jacinto Lázaro culminaban el nuevo asfaltado y comenzaban a pintar las marcas viales tras actuar en todo el entorno, incluyendo un tramo de la calle Manuel Altolaguirre.
Más tiempo tardarán en ver la luz las tres peatonalizaciones, que arrancaron con apenas unas semanas de diferencia, generando algunas quejas vecinales por la afección al tráfico y, sobre todo, la supresión de numerosas plazas de aparcamiento. En principio, se espera que las peatonalizaciones, encomendadas a Jacinto Lázaro, Herrero Temiño y RFS, respectivamente, culminen en verano tras inversiones de entre 500.000 euros y 1,3 millones.
15 Millones de euros
Las obras impulsadas por el Ayuntamiento y actualmente en marcha en la ciudad suponen una inversión conjunta de cerca de 15 millones de euros.
Las peatonalizaciones, en todo caso, no se circunscriben únicamente a Gamonal. También en la zona sur se está actuando en estos momentos en la calle San Julián, cuyas obras fueron adjudicadas a Herrero Teminño por 218.000 euros. En este caso, la actuación es de menor calado y se espera que los trabajos estén completados a lo largo del mes de abril.
Y de las peatonalizaciones a los carriles bici. Ahora mismo son dos los tramos en ejecución. El primero, encomendado también a Herrero Temiño por 280.000 euros, se está desarrollando en la barriada San Juan Bautista; el segundo, encargado a Padecasa por cerca de 700.000 euros, se circunscribe a la avenida Reyes Católicos.
Esa obra, que arrancó hace apenas un par de semanas, coincide en tiempo y lugar con la reparación del hundimiento de la calzada registrado años atrás en la propia avenida Reyes Católicos, a la altura de los juzgados, unas obras adjudicadas a la unión temporal de empresas formada por SFS y Site por 1,5 millones de euros y un plazo de ejecución de ocho meses que se prolongará hasta después de verano.
Otra de las grandes obras que se están desarrollando en los últimos compases de la legislatura es la construcción del Mercado Norte provisional en la Plaza de España, una actuación asumida por Grupo Herce por un presupuesto de alrededor de un millón de euros después de que la primera licitación quedara desierta.
En este caso, tampoco está previsto que el edificio esté operativo antes del final del mandato, ya que su construcción se prolongará, al menos, hasta finales de verano. A partir de ahí, tendrá que ser el próximo equipo de Gobierno el que impulse definitivamente la construcción del Mercado Norte definitivo, quizá el proyecto de mayor envergadura de los que se han gestado a lo largo de la legislatura sin que haya conseguido ver la luz.
También será el próximo equipo de Gobierno quien recepcione las obras de la tercera fase de la reforma del centro cívico Río Vena, el proyecto de mayor inversión de los actualmente en marcha. Los trabajos fueron adjudicados a la UTE formada por Geoxa y Emmepolis Novecento por algo más de 3,1 millones de euros con un plazo de ejecución de 24 meses y ahora mismo continúan trabajando en el edificio.
También continúan trabajando los operarios de RFS en la consolidación del talud de Pisones, una obra que ha tenido que sortear mil y un contratiempos, incluida su paralización temporal por el aumento de costes de construcción, y que se está prolongando mucho más tiempo del inicialmente previsto.
También ha superado el plazo inicialmente previsto para su finalización la construcción del nuevo Centro de Biodiversidad diseñado sobre el antiguo Centro de Divulgación de Aves del cerro de San Miguel. El presupuesto de la obra, adjudicada a Proviser Ibérica por 871.000 euros, tuvo que ser modificado al alza hasta los 957.000 euros y se espera que los trabajos concluyan en las próximas semanas.
Un plazo de conclusión similar presentan las obras de reforma de dos campos de hierba artificial en Pallafría, adjudicada a Mondo Ibérica por 289.000 euros, así como la peatonalización del entorno del Arco de San Martín. En este caso, el proyecto, adjudicado en su día a Jacinto Lázaro por 765.000 euros, se ha completado casi en su totalidad y está pendiente de apenas unos remates. Sin embargo, el movimiento continuará durante un tiempo en el entorno, ya que hace apenas unas semanas arrancaron las labores de limpieza y consolidación del tramo más cercano de la antigua muralla de la ciudad, una intervención encomendada a Construcciones Ortega por un presupuesto de 100.000 euros.
Esa, de hecho, es la penúltima obra que se ha puesto en marcha en la ciudad. La última arrancó esta misma semana en el cruce entre las calles Santa Clara y Progreso, donde el Ayuntamiento ha previsto invertir alrededor de 950.000 euros para aumentar la anchura de las aceras, reorganizar el tráfico rodado y, en definitiva, mejorar la movilidad de la zona. En este caso, también es la empresa Herrero Temiño la encargada de llevar a cabo la obra, que se extenderá hasta finales de verano.
En ningún momento de la legislatura que está a punto de concluir habían convivido en Burgos tantas obras. Y eso a pesar de que muchas de las actuaciones previstas inicialmente por el equipo de Gobierno se han ido retrasando por diferentes motivos y aún no han arrancado. En muchos casos, de hecho, no podrán empezar hasta el próximo mandato, si es que se ponen definitivamente en marcha.
En este sentido, destacan varios proyectos que han generdo una miríada de quebraderos de cabeza al equipo de Gobierno, como es el caso del centro cívico de Fuentecillas, la reparación de las filtraciones de agua en Villatoro, la reparación de las goteras en el aparcamiento de la Plaza de Santiago o la reforma de la calle Vitoria en Gamonal, una de las propuestas electorales de mayor relevancia del PSOE.
A partir de ahí, son numerosas las actuaciones que se mantienen en agenda. La más importante, desde el punto de vista cuantitativo y cualitativo, es la construcción del Mercado Norte, ya enfilada administrativamente, pero no es la única. En este saco también entran otros proyectos, como la rehabilitación y puesta en valor del Castillo, la construcción de un nuevo polideportivo en San Pedro y San Felices, la ampliación del Archivo Municipal, la reurbanización de varias calles en el casco histórico alto, la construcción del carril bici de López Bravo en Villalonquéjar o la urbanización del último tramo de Alcalde Martín Cobos en el polígono industrial Burgos Este.
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