Los trabajadores de Bridgestone no dan crédito. La compañía multinacional envió este jueves las comunicaciones para desafectar a la plantilla que estaba incluida en el ERTE, a fin de que se empezaran a incorporar a sus puestos de trabajo este viern. Las razones, poco ... explicadas, se encuentran en la entrada de un pedido de más de 90.000 cubiertas, así que toca volver a trabajar.
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«La parte social nos sentimos defraudados y en cierto punto engañados», explican los sindicatos, que incluso hablan de «tomadura de pelo». Bridgestone solicitó, a mediados de noviembre, aplicar una medida de flexibilidad negativa, pero como los sindicatos se negaron, se tuvo que abrir un proceso negociador para un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE).
Tras varias reuniones, la pasada semana se cerraba el acuerdo, que afectaba a todas las plantas de la firma en España. Para Burgos, el ERTE se iba a aplicar del 22 al 31 de diciembre, y así se comunicó a los trabajadores afectados. Sin embargo, cuando no se llevaba ni un día de parón, la empresa empezaba a mediodía a enviar las cartas para la incorporación de los trabajadores a su turno.
De este modo, el trabajo ha vuelvo a Bridgestone. El turno de tarde funcionará casi con normalidad, lo mismo que el de noche, y a partir del 26, la planta estará plenamente operavia (los días festivos no se trabaja). Los sindicatos reconocen que la empresa puede desafectar a los trabajadores del ERTE, siempre y cuando les informe con al menos 24 horas de antelación.
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Gabriel de la Iglesia
Eso sí, que lo pueda hacer no quiere decir que sea lo normal o lógico. Critican que, «si era tan urgente el ERTE hace un mes, nos choca que ahora ya no sea necesario«. Las razones que sustentaron la medida eran causas productivas, por un exceso de materiales almancenados y caída de las ventas. Ahora, sin embargo, ya no hay ese problema y tienen que responder a un pedido grande.
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Los sindicatos lamentan que no se les haya dado más explicaciones. Solo saben que ha entrado un pedido de 90.000 cubiertas y que el ERTE se desactiva en Burgos, mientras se mantiene en resto de las plantas. Y recuerdan que los trabajadores afectados ya tenían sus planes, planes que ahora han tenido que desmontar de la noche a la mañana. «No nos parece muy normal», insisten.
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