Los voluntarios de Protección Civil de Burgos presentan su baja temporal y suspenden el servicio

Así se lo han hecho saber al alcalde, Daniel de la Rosa, y a la concejala de Seguridad Ciudadana, Blanca Carpintero, minutos antes de hacer efectiva la baja en el registro del Ayuntamiento. Llevan más de diez años reclamando la mejora de sus instalaciones de la calle Juan Bravo, pues «no reúnen las condiciones óptimas de seguridad, salubridad y funcionalidad».

El edificio, las antiguas dependencias del laboratorio municipal, está «enfermo». Presenta graves deficiencias en los suministros básicos de luz, agua, desagües, pavimentos... También daños estructurales por las continuas filtraciones de aguas pluviales y las cañerías de la instalación, según la denuncia realizada por los voluntarios.

«Desde hace años son recurrentes las fugas de agua, averías en la instalación eléctrica y calefacción, desprendimientos de falsos techos, bovedillas, humedades, cortocircuitos...», lo que genera una situación «insostenible» que el equipo de Gobierno se había comprometido a solucionar, a través de la creación de una nueva base en Villafría.

Hay proyecto, recuerdan, y había el compromiso de incluir presupuesto para ejecutar las obras en el modificado de crédito que se ha aprobado inicialmente en el pleno de este viernes. Sin embargo, no ha sido así y, por ese motivo, ante una «situación de decepción absoluta», y tras sentirse un colectivo «totalmente ninguneado», han presentado la baja temporal.

De la Rosa y Carpintero han explicado a los voluntarios el porqué de este incumplimiento, asumiendo el alcalde toda la responsabilidad, pues ha sido una decisión más técnica que política, consensuada con el área de Intervención y la Concejalía de Hacienda. Y se basa en el hecho de que solo se han incluido en el modificado proyectos que diera tiempo a ejecutarse y, en este caso, no hay ni pliegos de condiciones elaborados.

El regidor ha insistido en que, aún poniéndose ahora a preparar dichos pliegos, hasta finales del verano no se dispondría de los mismos y, para entonces, no habría opción de iniciar las obras. Por eso ha quedado fuera. Eso sí, el compromiso del PSOE es tener la nueva sede en obras en 2024, con reserva de partida ya cerrada para el presupuesto del próximo año, si ganan las elecciones y vuelve a ser alcalde de Burgos.

Mientras, Carpintero se compromete a realizar una pequeña inversión para «adecenar» las instalaciones actuales, que se encuentran en un estado «lamentable» y son «desastrosas», ha admitido. Sería una solución temporal mientras llega la nueva base y habría que buscar partida, tal vez en alguno de los conceptos de mantenimientos de instalaciones incluidos en la modificación de crédito.

La concejala ha insistido en que de nada sirve comprometer, incluso por escrito como le piden los voluntarios, algo que se sabe que no se va a hacer o que está en el aire. Y ha recordado que la propia modificación se encuentra en esa situación, pues su aprobación definitiva no se producirá hasta pasadas las elecciones municipales.

Es esa fecha la que han puesto, de momento, los voluntarios para su baja temporal. Se mantendrán hasta entonces, como mínimo, aunque se vayan a reunir con el equipo de Gobierno la próxima semana para ver cómo abordar esa intervención de mantenimiento tan necesaria y se conozcan las opciones reales para acometer la otra obra.

Además, el alcalde les ha animado a que presenten una alegación a la modificación de crédito, que será respondida por los técnicos. Ahí se verá cuál es el motivo para no incluir el proyecto, ha afirmado, y se comprobará que al no haber pliegos de condiciones para licitar la obra se ha optado por dejarla fuera, solo por motivos técnicos.