Las trabajadoras sociales piden un reconocimiento «efectivo», «hartas de ser la cenicienta»

El colectivo se reunió este jueves con las concejalas de Personal y Servicios Sociales, Nuria Barrio y Sonia Rodríguez, pero solo constató que existen posturas «distanciadas». Las ediles, como hicieran ante los medios de comunicación, volvieron a defender que han cumplido con los compromisos adquiridos y apuntaron que no entienden la convocatoria de huelga.

Sin embargo, para las trabajadoras sociales este parón encaja en las protestas que han ido desarrollando los últimos meses. Luis Delgado, portavoz del colectivo, recuerda que «no han dado guerra hasta ahora», aunque los problemas los vienen arrastrando desde hace más de una década. También se sienten «fortalecidos» y valoran los pasos hacia delante que se han dado, aunque sean insuficientes.

Las trabajadoras sociales son conscientes de que su movimiento ha llevado, por ejemplo, a la realización de valoraciones de puestos de trabajo pendientes y a conseguir un compromiso firme del equipo de Gobierno para hacer en 2023 una valoración para todo el Ayuntamiento. Sin embargo, Delgado recuerda que la que les afecta a ellas no cubre sus pretensiones.

El reconocimiento que reclaman no es solo económico, que también, pues ven diferencias en conceptos similiares entre grups de funcionarios municipales; es un reconocimiento social y laboral, pues las funciones, competencias y responsabilidades han aumentado en los últimos años sin que se haya tenido en cuenta, lamentan. De ahí la necesidad de la nueva valoración.

Delgado afirma que los servicios sociales «son indispensables» y que la falta de personal, los retrasos en la cobertura de baja, la sobrecarga laboral impacta en la atención que se da a los ciudadanos. Por eso piden refuerzos, recuerdan que la bolsa de empleo convocada no ha funcionado y que la incorporación de nuevos profesionales queda al albur del próximo gobierno municipal.