De la Rosa ve «imposible» recuperar el Peña Amaya pero afirma que «intentarán» recuperar parte de su valor

El último capítulo de este culebrón, que viene coleando desde hace quince años, ha sido el auto del Juzgado de lo Mercantil de Madrid por el que se aprueba el plan de liquidación concursal de la empresa antigua propietaria del Peña Amaya. En el mismo se incluye al edificio como parte de su masa concursal, para su subasta, cuando el Ayuntamiento había solicitado que no fuera así.

Para entender la trascendencia del acto hay que remontarse años atrás, cuando el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León dictó sentencia, en 2009, por la que se declaraba nulo el acuerdo de permuta que facilitó la adquisición del Peña Amaya. El Ayuntamiento se hizo con el edificio en 2005, para convertirlo en un albergue juvenil, y a cambio se entregó suelo municipal por valor de 4,5 millones de euros.

El PSOE lo denunció, al considerar que no existía justificación de interés público para enajenar suelo municipal y el TSJ exigió la reversión del acuerdo. Sin embargo, para cuando el Ayuntamiento le pidió a la empresa que le devolviese los terrenos, estos ya no estaban en su poder, así que el TSJ aceptó la fórmula de la dación en pago: el Ayuntamiento se quedaba con el edificio, valorado en 3,3 millones, y los 1,2 millones restantes tendrían que pagarse a través del concurso de acreedores.

La portavoz municipal, Nuria Barrio, ha recordado que el registro del edificio no se hizo de manera adecuada, pues al quedar invalidada la permuta, se invalidó también la inscripción previa. Y así el Peña Amaya ha quedado incluido dentro del plan de liquidación de su antiguo propietario, habiendo perdido el Ayuntamiento tanto el edificio como la diferencia de valor.

Ahora, el Ayuntamiento intentará gastar las dos últimas balas que le quedan para, al menos, recuperar algo del valor del Peña Amaya. Para empezar, se remitirá el lunes un escrito de alegaciones para solicitar que se califique el concurso de acreedores como culpable y así intentar recuperar algo del valor. «Poco probable», reconocer De la Rosa, como lo es también el recurso de apelación que se presentará para que no se incluya el Peña Amaya en la masa concursal.

«Las opciones de éxito son escasas», ha afirmado el alcalde, quien no descarta que toque revisar de quién es la responsabilidad de haber acabado en esta situación, que deriva de una permuta anulada y un registro del bien incompleto. «La realidad es que es imposible que el Peña Amaya vuelva al patrimonio municipal» y parece que la única opción que quedaría sería intentar recuperar una parte de su valor.