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El grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento de Burgos exige medidas más duras y específicas para erradicar los grafitis, visto que el problema se va agravando por momentos. El concejal Fernando Martínez-Acitores ha recordado que, hace un año, ya pidieron medidas más contundentes ... y, pasados los años, la situación no ha hecho más que empeorar, con grafitis tanto en el centro histórico como en los barrios.
«Burgos se ha convertido en el paraíso de los grafiteros», asegura el edil, así que pide en primer lugar que se endurezcan las sanciones, con multas de 1.000 euros. También que se controle a los proveedores de pintura y ahondar en campañas de concienciación. Fernando Martínez-Acítores plantea, además, que se promueva una ordenanza específica contra el vandalismo, tanto el gráfico como el relativo a botellones, «un tema que se está descontrolando».
Al mismo tiempo, el concejal lamenta que las áreas municipales se «laven las manos» ante la problemática, echando balones fuera y pasándose las reponsabilidades. Desde Seguridad Ciudadana aseguran que es competencia de Medio Ambiente y, aquí, aunque se realizan campañas de limpieza, admiten que son insuficientes y que, en muchos casos, al día siguiente de haber limpiado un grafiti aparece otro. Para Vox, esto demuestra que no se está atajando la raíz del problema.
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