La nueva ordenanza de Movilidad iba a aprobarse inicialmente en el Pleno municipal del pasado mes de septiembre, pero al final no entró en el orden del día de la sesión. Y todo hace indicar que tampoco entrará en el orden del día del Pleno ... programado para la semana que viene, a pesar de que el documento ya cuenta con todos los parabienes necesarios como para someterse a debate y votación.
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Al menos así lo ha asegurado hoy el concejal socialista Antonio Fernández Santos, que ha insistido en que la ordenanza «está absolutamente lista para aprobarse» después de que se presentaran «todos los informes» solicitados a última hora.
Sin embargo, ha criticado, el expediente sigue a la espera porque el alcalde, Javier Lacalle, «lo está vetando», aunque desconoce los motivos.
En este sentido, Fernández Santos se lamenta del retraso que se está registrando en la aprobación de la ordenanza después del enorme esfuerzo que ha supuesto su redacción. Un trabajo que se ha prolongado durante más de dos años y en el que han participado técnicos municipales, grupos políticos y diferentes colectivos vecinales.
Desde el Equipo de Gobierno han pedido «respeto y tranquilidad» a Antonio Fernández Santos, asegurando que el alcalde «ha dado prioridad esta legislatura a estas dos complejas ordenanzas». En un comunicado, el Partido Popular ha recordado que el documento se presentó ante el secretario general para que emitise el preceptivo informe; sin embargo, se ha tenido que devolver a la concejalía pues faltaban informes técnicos.
«En cuanto estén todos los informes necesarios, técnicos y jurídicos, el alcalde elevará al Pleno municipal dicho texto para su aprobación inicial y someterse a información pública; lo mismo que sucederá con la ordenanza de terrazas», han apuntado los PP.
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Por otra, Antonio Fernández Santos, y sin salir del ámbito de la movilidad, el concejal socialista ha vuelto a exigir a Lacalle que derogue el decreto por el que la calle Santander se está cerrando parcialmente al tráfico rodado durante los domingos y los festivos. A su juicio, dicho decreto fue una «cacicada» con la que «nadie está de acuerdo» y que está generando muchos problemas. De hecho, la propia Policía Local ha elevado un informe mediante el que pone en cuestión la seguridad de la medida, ya que a pesar del cierre, los autobuses, taxis y vecinos del entorno pueden circular por la vía. «Ha podido haber un accidente», ha resumido el concejal.
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