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Llegar, dar un beso a los niños e irse. Sin paradas en doble fila, sin bajarse del vehículo, sin esperar a ver cómo entra en el colegio ni ponerse a hablar con otros padres. Movilidad apuesta por la fórmula 'Kiss & Go' para reducir ... los atascos y problemas de circulación que se producen a la entrada y salida de los centros escolares de Burgos. Y el proyecto piloto ya está en marcha.
Este viernes, la empresa encargada del contrato municipal de señalización viaria, recién adjudicado, ha pintado con unas líneas amarillas las zonas habilitadas frente a los colegios Fuentecillas y Jueces de Castilla. Será ese espacio el que podrán utilizar los padres para parar brevemente a la puerta de ambos centros escolares y dejar, o recoger, a sus hijos. Entrar y salir, poco más.
La opción más saludable sería que los niños pudieran ir andando, en bicicleta o en transporte público a sus colegios, pero no siempre es posible y tienen que llevarlos sus padres en coche. Sin embargo, ello no debería de justificar que, a las horas punta, los entornos de los centros se conviertan en un punto de congestión, en el que se crean múltiples situaciones de riesgo para otros usuarios.
De ahí este proyecto piloto que, si funciona, se extenderá por más centros escolares de Burgos. Eso sí, cuenta con detractores. Los vecinos de las zonas afectadas critican que se les vaya a condicionar el aparcamiento y asociaciones como Burgos con Bici lo ve como un atraso, pues no se avanza en la pacificación de la ciudad y sigue otorgando gran protagonismo al vehículo privado.
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