La pista de BMX de Burgos 'desaparece' después de más de 30 años de abandono

Asegura Temiño que la pista está «completamente abandonada, las hierbas se han comido toda la instalación, ahora mismo está impracticable, inservible, es peligroso practicar ahí BMX». La última vez que se dirigieron al Ayuntamiento de Burgos con esta petición fue con Daniel de la Rosa como regidor. De hecho, el PSOE llevaba en su programa electoral recuperar el circuito de BMX en el parque de Fuente Prior. «Pero ha vuelto a pasar lo mismo, no se ha hecho nada», lamenta Temiño.

Aun así, aseguran que hay afición por este deporte que es olímpico, consideran que la zona de Fuente Prior es «estupenda» para la instalación, «está el campin cerca, hay aparcamientos, naturaleza, lugar para los padres de los niños que acudan», enumera Temiño. Por todo ello, volverán a solicitar al Ayuntamiento, ahora dirigido por Cristina Ayala, que arregle esa pista de BMX que está completamente abandonada.

La pista se construyó en 1987 por el Ayuntamiento de Burgos. «En ese momento era un deporte en auge. Cuando se creó la pista en Burgos fue una de las pioneras en Castilla y León, junto con Valladolid y León. Eran de las más importantes de la zona norte», asegura Raúl Temiño. El problema, como recuerda este aficionado al BMX, es que «desde entonces no se ha intervenido en ella, más de 36 años».

En esta pista incluso se celebraron campeonatos regionales y nacionales. «En el año 1995 organizamos aquí el campeonato nacional», recuerda Temiño. «En ese momento ya habíamos empezado a hacer gestiones porque desde que se construyó no se había mantenido. Habían pasado ocho años y creíamos que tocaba una renovación. La tendencia del deporte ya no era la misma y empezamos negociaciones con el ayuntamiento. Todo eran buenas palabras, pero no nos hicieron caso», recuerda.

Y esa historia se repite hasta la actualidad. 36 años con una pista de BMX construida por el Ayuntamiento, pero sin ningún tipo de mantenimiento ni cuidado. Hasta el año 95 eran los propios usuarios lo que, a pico y pala, arreglaban los saltos, curvas y las pistas. Es una pista al aire libre, de tierra, la lluvia, los hielos le afectan y la van degradando hasta llegar a lo que es actualmente, un campo de hierba con algunas pistas estrechas comidas por la maleza y saltos inexistentes.

«Parece que la construyeron y la dejaron abandonada a su suerte. Crece la hierba, los anchos de pista de las rectas ya no son válidos. El Ayuntamiento ha pasado de nosotros olímpicamente», lamenta Raúl Temiño.

Desde este club de BMX explican que una pista para este deporte no exige mucho mantenimiento, pero si se abandona, al final, el trabajo y la inversión para recuperarla son mayores. Los usuarios dejaron de involucrarse en mantener la pista. «Es insostenible, llega un momento en el que ves que por parte del ayuntamiento solo hay desidia y nosotros ya no tenemos ni el tiempo ni los medios para estar arreglándola. Así que, deja de usarse y empeora la situación», añade Raúl.

Ahora mismo no se puede practicar allí BMX con seguridad. Sí acuden algunos jóvenes, pero para la práctica deportiva es imposible, «incluso hasta peligroso», remarca Temiño.

Además, la tendencia del deporte ha ido cambiando, las curvas con peralte ahora son de asfalto, para evitar la degradación, por ejemplo. «Los correderos de Burgos de BMX hemos acudido a campeonatos mundiales. Teníamos buenos resultados, pero el Ayuntamiento nunca le ha dado importancia, al menos no la suficiente como para invertir en esa pista», sentencia Temiño.