Marañón defiende su posición «útil, constructiva y proactiva» en el Ayuntamiento de Burgos

En este contexto, apuntó que en el extremo opuesto de esta posición «útil, constructiva, proactiva y responsable» colocó al resto de partidos, en particular al PSOE, del que dijo que «no ha sido capaz de dibujar aún un modelo de ciudad, ni de plantear unos objetivos estratégicos». En este sentido, reconoció que si bien el PP «ha evidenciado con intensidad creciente un pobre desempeño técnico administrativo de la acción de gobierno con situaciones concretas que nos preocupan por el bloqueo que pueden generar y el riesgo de judicialización que implican», lo hace «sin ofrecer alternativa alguna».

Marañón compareció junto al resto de concejales de la formación -salvo Miguel Balbás, que no pudo acudir a la cita por motivos de salud- y tras una valoración general del curso del mandato detalló las áreas en las que urge actuar, ámbitos en los que, una vez más, Cs exigió «mejoras contundentes e inmediatas, pensando en un #FuturoParaBurgos».

En concreto, Vicente Marañón, se refirió a ejes cruciales como la Movilidad, materia en la que «contemplan con inquietud la lentitud o deficiente implementación de propuestas de Cs que fueron asumidas por el equipo de Gobierno»; la Cultura, «con el funcionamiento del IMCT deteriorado hasta el punto de tener graves problemas administrativos que acaparan todo el debate»; o la proyección de la ciudad. «Promueve Burgos languidece sin rumbo y el alcalde distrae sus recursos técnicos y presupuestarios en la gestión ordinaria del Ayuntamiento, desvirtuando la razón de ser de esta sociedad y arrebatando a Burgos un instrumento esencial para su desarrollo», manifestó.

En su repaso, el portavoz del partido liberal cuestionó la política deportiva, «dadas las deficiencias que persisten en las instalaciones y el grave problema vinculado a la gestión de las escuelas deportivas» y la inacción en materia turística, aspecto en el que Cs ahondaba recientemente con la esperanza de que «el equipo de Gobierno reaccione y se logre salvar el verano y diseñar una estrategia a medio y largo plazo de la que hasta el momento Burgos carece».

Finalmente, Marañón se refirió también a otros motivos de preocupación tales como la «falta de transparencia» y el «abuso» de los contratos menores, los retrasos en la concesión de licencias, «lo lejos que aún está el Ayuntamiento de Burgos de ser una administración moderna y la falta de recursos que faciliten la relación con los ciudadanos, o la ausencia de avances reales y efectivos en el relevante proyecto del nuevo Mercado Norte».