El pleno del Ayuntamiento de Burgos ha tomado conocimiento de la renuncia al acta de concejal de Julio Rodríguez-Vigil, lo que pone punto y final a la crisis interna de Ciudadanos. Rodríguez-Vigil ha dejado de ser concejal no adscrito, tras presentar semanas atrás su renuncia ... , después de una rueda de prensa en la que lamentaba el trato recibido.
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Si la marcha del ex edil se hubiera producido antes, Ciudadanos habría podido recuperar el quinto concejal que le correspondió en las elecciones de 2019, y que tenía hasta el abandono de Rodríguez-Vigil. Pero dado que falta una semana para las próximas elecciones, que marcan el fin del actual mandato, Cs lo acabará con cuatro ediles.
El procedimiento de sustitución se iniciará de igual modo, es decir, se solicitará la correspondiente credencial a la Junta Electoral para que determine a quién le toca entrar (ya se sabe, el siguiente en la lista era Rafael Martínez). Sin embargo, no se podrá incorporar como concejal al Ayuntamiento pues la próxima semana se suspenderá el trámite.
La intención, en el pleno ordinario de este mayo, era no iniciar ni siquiera el procedimiento. Sin embargo, el portavo de Vox, Ángel Martín, ha recordado que la ley obliga. Así que arranca la tramitación hasta donde se pueda llegar. El mandato acaba con la nueva convocatoria electoral y el de hoy es el último pleno del mismo.
Ante esta situación, Vicente Marañón ha mostrado su «indignación» por tener que convivir con concejales no adscritos, que según el pacto antitransfuguismo se pueden considerar tránfugas. «Ya está bien de que Burgos siempre termine el mandato con tránsfugas; es intolerable y una burda al estado de derecho», ha indicado.
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El portavoz de Cs y vicelalcalde hacía referencia no solo a Julio Rodríguez Vigil, quien ha impedido que Cs tenga los cinco concejales que le corresponden, pero también a Carolina Blasco. Su salida del PP la ha colocado como concejala no adscrita, algo «especialmente doloroso» pues ha sido la portavoz del PP y es catedrática de Derecho.
«El Ayuntamiento sigue sin estar libre de tránsfugas», ha aseverado. «Hay que respetar el fondo y la forma del estado de derecho». Y dado que a los ciudadanos solo se les deja opinar cada cuatro años, «lo mínimo que podemos hacer es repetar su voluntad» y esa era los siete concejales del PP y los cinco de Cs.
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