El hundimiento de Reyes Católicos obliga a cortar al tráfico un carril sentido Plaza de España

El cierre se producirá a partir de este mismo lunes y, además, el concejal de Vías Públicas, Julio Rodríguez Vigil, explica que se inhabilitarán los aparcamientos ubicados sobre la ribera del Vena, en el mismo tramo, que es el que presenta un mayor deterioro. De hecho, a mediados de febrero se colocaron varias señales para reducir la velocidad máxima de circulación a 20 km/h, como medida de seguridad.

Los badenes por el hundimiento del suelo se han detectado en toda la Avenida Reyes Católicos entre los números 40 y 53, en una diagonal que afecta tanto a los carriles dirección Avenida de Cantabria como los que bajan a Plaza España. También hay badenes en las propias aceras de las riberas del Vena, si bien lo peor se encuentra en el tramo ubicado justo en frente de los Juzgados.

Por ese motivo, Rodríguez-Vigil no descarta que se pueda llegar a cortar el tráfico por completo en Reyes Católicos en los próximos meses, aunque de momento el cierre solo va a afectar al carril izquierdo. Mientras, se está a la espera de contratar la redacción del proyecto de intervención que plantee una solución definitiva a un problema detectado hace años y que, con el paso del tiempo, se ha ido agravando.

Dicho proyecto contará con un estudio geotécnico y geológico, que determine las causas del hundimiento, de modo que la intervención no se quede en una mera reparación de los desperfectos, sino que suponga el fin definitivo del problema. Eso sí, el proyecto que se redacte de incluir las actuaciones necesarias para reparar los daños ocasionados en calzadas y aceras y reforma también en canalizaciones, alumbrado o mobiliario.

Las explicaciones que se barajan para lo ocurrido en Reyes Católicos, a falta de confirmación de los estudios pertinentes, hablan de que un paleocauce del Vena estuviera socavando el suelo y provocando esos hundimientos, que en algunas zonas alcanzan los 30 centímetros de profundidad. Con el corte al tráfico se pretende dar seguridad a la zona e intentar frenar el deterioro mientras se contrata el proyecto y, luego las propias obras.