Fomento lleva al Consultivo la indemnización reclamada por Domusolco

El Consejo de la Gerencia de Fomento acordó, en su última reunión del año del pasado año, remitir el caso al Consejo Consultivo, un trámite imprescindible para continuar adelante con el procedimiento, ha recordado Ana Bernabé. La concejal ha explicado que, si bien la solicitud de informe es preceptivo, el mismo no es vinculante. Sin embargo, el Ayuntamiento tiene intención de asumir su contenido, que esperan coincida con su decisión, amparada en el informe del gerente del servicio.

Cuando el Ayuntamiento de Burgos anuló el acuerdo de Junta de Gobierno Local de mayo de 2015, por el que se adjudicaba a Domusolco la parcela en concesión demanial, por 30 años a razón de 25.000 euros al año y un 5 por ciento de los beneficios, la empresa exigió una indemnización. En el escrito registrado en junio de 2017, Domusolco reclamaba el inicio de un procedimiento de responsabilidad patrimonial, una indemnización de 1.086.000 euros, en concepto de lucro cesante y daños derivados de la preparación de la oferta.

Sin embargo, el gerente de Fomento considera que «no existe relación de causalidad entre el funcionamiento del servicio público y el daño causado», así que desestimó la petición con informe de 24 de agosto. Desde entonces, el Ayuntamiento ha estado tramitando las correspondientes alegaciones presentadas por Domusolco y, tras desestimarlas en diciembre, se ha remitido el caso al Consejo Consultivo.

El órgano de Castilla y León ya fue consultado tras acordarse revocar la adjudicación y, entonces, dio la razón al propio Consistorio. En su informe, el Consultivo consideraba que procedía declarar «nulo de pleno derecho» el acuerdo de la Junta de Gobierno Local, pues la resolución se basaba en una «infracción esencial» del procedimiento de adjudicación, al haberse aceptado una modificación «sustancial» de la oferta presentada por Domusolco en pleno desarrollo del concurso.

Y es que la empresa planteó inicialmente levantar en la parcela un aparcamiento público de gestión privada con 95 plazas, además de dos edificaciones complementarias: una comercial de 1.000 metros cuadrados y otra de uso recreativo de 250 metros cuadrados. En total, 3.700 metros cuadrados construidos en una única altura. Sin embargo, Domusolco modificó la oferta planteando un edificio de dos plantas, de 4.600 metros cuadrados por planta, con un aparcamiento de 230 plazas y uso comercial en más de 2.300 metros cuadrados. Una modificación «sustancial» que debería haber excluído a Domusolco del procedimiento y, por tanto, el concurso debería haberse declarado desierto, apuntaba entonces el Consultivo.