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Muros de ladrillos resquebrajados, alicatados caídos, paredes con agujeros, cuados eléctricos rotos, agujeros en el suelo, múltiples goteras, iluminación defectuosa... Las cocheras de autobuses urbanos de Burgos capital, ubicadas en la Carreterra Poza, presentan graves deficiencias, un acúmulo de desperfectos que pueden llegar a poner ... en riesgo a los profesionales que trabajan en las instalaciones municipales.
Así lo aseguran las denuncias llegadas a este periódico, con las que se quiere levantar la voz ante el estado «lamentable» que presentan las cocheras, «en ruina», insisten, después de haber ido dejando que se deterioraran poco a poco. «Desde muros de ladrillo que se caen y ni siquiera se aparta el escombro hasta agujeros en el suelo, que en vez de ser reparados son tapados con losas de chapa para carretera».
Las paredes presentan agujeros, los techos están caídos, «los cuadros eléctricos rotos, con cables expuestos, la calefacción arrancada de cuajo y a punto de caer al suelo y más del 50% de los focos de iluminación fundidos», insisten las denuncias. En los lavaderos, uno no funciona y el otro está al 60%, tampoco tienen taquillas y la iluminación falla en todas las dependencias.
Las intalaciones son «precarias», aseguran. Del sótano salen malos olores y hay suciedad. Por no hablar de las goteras, que hacen que las instalaciones municipales se inunden cada vez que llueve. Y falla la seguridad y la vigilancia. Además, las denuncias lamentan que, pese a esta situación crítica, e incluso «peligrosa», por las cocheras municipales «nunca ha pasado una inspección de trabajo».
Un grave deterioro del que conocerdor el Ayuntamiento de Burgos. En la memoria del proyecto para la construcción de las nuevas cocheras en el Polígono de Villalonquéjar, que se encuentra en fase de redacción, se reconoce que las instalaciones municipales «se encuentran bastante deterioradas y con una necesidad apremiante de actuación inminente de reparación y conservación».
Sin embargo, habrá que esperar unos cuantos años para poder contar con unas nuevas cocheras, pues el proyecto acaba de echar a andar. Este mes de enero, el Servicio de Movilidad y Transportes (Samyt) ha adjudicado a MBG Ingeniería y Arquitectura la redacción del proyecto de ejecución por 209.842 euros. Dispondrá de 18 meses para entregar todos los documentos.
Las cocheras municipales se inauguraron en la Carretera Poza en 1967, pero un cambio en la calificación de los terrenos en 2012 impide que se puedan mantener en la misma ubicación. El actual equipo de Gobierno intentó en 2019 buscar una solución, recalificar los suelos, para que fueran compatibles con la dotación, pero no ha sido posible. De ahí la necesidad de buscar una ubicación alternativa.
Se ha escogido una parcela en Villalonquéjar, en la calle Valle de Zamanzas. Allí se quiere levantar una zona de estacionamiento, talleres, vestuarios, oficinas, servicios varios y zona de combustibles. Estamos hablando de un proyecto muy ambicioso que se elevaría hasta los 8,5 millones de euros, pero que primero debe redactarse, luego aprobarse y, finalmente, ejecutarse las obras. Mientras, las actuales cocheras siguen deteriorándose.
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