La conexión entre La Puebla y San Lesmes, para 2023

El concejal de Urbanismo recuerda que el problema se viene arrastrando desde el año 2016. El actual equipo de Gobierno lo heredó y, ahora por fin, se puede dar por «desatascado». En su momento, se presentó un proyecto de expropiación con la correspondiente relación de bienes y derechos, pero se detectó que esta no era correcta, así que se tuvo que anular todo el procedimiento y el caso acabó en el Consejo Consultivo.

El Consejo de la Gerencia de Fomento ha aprobado este martes la nueva relación de bienes y derechos a expropiar, que se llevará a la Junta de Gobierno Local para su aprobación definitiva y, a partir de ahí, todo queda en manos de los propietarios de la parcela de la antigua Comandancia de Obras, subastada por el Ministerio de Defensa. Será el promotor urbanítico el que tenga que encargarse de la urbanización del espacio público, que dará paso al vial de conexión.

«Los nuevos promotores tienen un calendario», ha apuntado Garabito, y pasa por iniciar el desmantelamiento y la urbanización en el último trimestre de 2022 y la urbanización podría concluirse en 2023, ya que debe ir a la par que el desarrollo del edificio de viviendas previsto. Así que los plazos que se manejan son que «a finales de 2022 esté la obra en marcha y la urbanización rematada en 2023».

Eso sí, primero toca aprobar el proyecto de reparcelación y de actuación, pero «será cuestión de meses, insiste Garabito. De este modo, en un corto espacio de tiempo, Burgos tendrá »una nueva plaza en el corazón de la ciudad, en pleno Camino de Santiago, y se podrá disfrutar de un lienzo de la muralla que ha permanecido oculto. El concejal solo espera que no haya nuevos imprevistos que impidan desarrollar el proyecto.