El Ayuntamiento de Burgos ratifica las dos últimas sanciones a Scooby

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Ruth Rodero

Se trata de dos sanciones de 709 euros cada una impuestas en su día por contravenir alguna de las cláusulas contempladas en el contrato suscrito con la empresa.

En este caso, se hacía referencia a la no recogida en tiempo y forma de un perro potencialmente peligroso y a la colocación de microchips a nombre de la empresa, en vez de al del Ayuntamiento, tal y como explicó meses atrás la portavoz del equipo de Gobierno, Andrea Ballesteros.

Estas dos nuevas sanciones ya definitivas se suman a las aplicadas con anterioridad a la empresa, con la que el Ayuntamiento mantiene una relación tensa ya desde el pasado mandato.

De hecho, Ballesteros ha ratificado hoy que, ante los reiterados incumplimientos por parte de la protectora, el departamento municipal de Medio Ambiente está valorando una posible rescisión del contrato que mantiene con ella.