Rostros cariacontecidos en las filas del PP y sorpresa entre los concejales del equipo de Gobierno. El viceportavoz del PP en el Ayuntamiento de Burgos, Jorge Berzosa, ha lanzado hoy un mensaje que ha sonado a despedida del Pleno. O al menos, a algo ... parecido a una despedida.
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Aprovechando el debate de la última proposición presentada por los 'populares' a la sesión plenaria, Berzosa ha finalizado su alocución afirmando que «a lo mejor» es la «última vez» que toma la palabra en el salón de Plenos. «Seguro que esta es la última vez que intervengo en este Pleno este año, y a lo mejor también en el futuro», ha asegurado al tiempo que agradecía al resto de corporativos «el tiempo prestado, la paciencia y la tolerancia». Y es que, tal y como ha reconocido, «con la pasión con la que he gestionado mis áreas, a veces he rozado los límites de lo tolerable».
Su discurso ha caído por sorpresa en el salón de Plenos, y las concejalas Rosa Niño y Marga Arroyo, portavoces de Cs y Podemos en el debate, han hecho referencia al mismo. Así, Arroyo ha reconocido haberse quedado «sin palabras». «A pesar de las discrepancias, le tengo una cierta simpatía y respeto mucho sus conocimientos y su dedicación. Espero que allá donde esté podamos seguir debatiendo y aprendiendo de movilidad sostenible», ha señalado.
En todo caso, el propio Berzosa no ha querido aclarar su futuro de manera concreta. Respondiendo a la pregunta de si era una «despedida» formulada por parte de Niño y aludiendo a los versos de Machado, Berzosa se ha limitado a afirmar que «ni el mañana ni el ayer está escrito». Lo que está claro es que, siga o no en el Pleno, su participación en los debates, siempre muy activa, se verá sustancialmente reducida, tal y como ha confirmado a este periódico. «Hay que ir dejando paso», ha subrayado de manera escueta.
Durante toda esta legislatura, Berzosa ha sido uno de los pesos pesados del grupo municipal del PP, primero con Javier Lacalle a la cabeza y, tras la renuncia de este, con Carolina Blasco, de la que ha sido su mano derecha. Ahora, la decisión de la cúpula del PP de designar a Cristina Ayala como candidata a la Alcaldía de Burgos ha cambiado el escenario radicalmente.
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