Adiós a cuatro años de experiencia excepcional

Los concejales han ido llegando escalonadamente, formando corrillos y han empezado las despedidas, que se han formalizado durante la sesión plenaria. Ha habido muchos agradecimientos, a los compañeros de grupo, a la oposición, a los funcionarios... en genérico y con nombres concretos; a todos o solo a algunos.

Y mucha emoción pues algunos se despiden definitivamente de la tarea municipal, no repetirán como concejales a partir del 17 de junio. Entre ellos, César Rico, que deja la política agradeciendo al Partido Popular y a los burgaleses que le hayan permitido estar durante cinco mandatos. Y ha deseado «suerte» a todos los que se van.

El alcalde, Daniel de la Rosa, ha asegurado que «es un verdadero orgullo y un honor formar parte de esta corporación». La experiencia es «única y excepcional» y, en este mandato, expecialmente complicada. El PSOE empezó gobernando solo, vivió una pandemia y acabó pactando con Cs, a los que les ha agradecido «su lealtad hasta el último momento».

«Ser alcalde es lo mejor que te puede pasar en política», ha afirmado emocionado; no hay otra reponsabilidad que se pueda equiparar. De ahí que haya aprovechado el pleno para dar la enhorabuena al próximo alcalde (será alcaldesa, Cristina Ayala, si no hay sorpresas de última hora) y le ha deseado «acierto» en la nueva tarea.

La portavoz de Podemos, Marga Arroyo, ha sido la primera en intervenir para despedirse de la corporación municipal. Ha asegurado que ser concejala es «una gran experiencia que debería ser obligatoria para todos los ciudadanos». Gracias a estos cuatro años sabe cómo funciona un ayuntamiento, y la política.

Ella ha tenido palabras de agradecimiento para los socialistas Leví Moreno y Josué Temiño; «hemos estado muy bien juntos», ha afirmado. Y al resto de los grupos, sobre todo los de la oposición, les ha agradecido que la hayan hecho aprendcer «a tortazos» lo que es la política, que solo se entiende si se está dentro.

«Hasta en el carné de identidad» han dado a Ciudadanos durante este mandato, pese a lo cual «lo hemos hecho muy bien», ha afirmado Rosa Niño. Mientras, Vicente Marañón ha tenido unas palabras de recuerdo para Gloria Bañeres, quien lideró Cs cuando llegó al Ayuntamiento hace ocho años, junto ahora cuando la formación desaparece.

El vicelacalde ha destacado el «compañerismo» en el seno del equipo de Gobierno, mencionando de manera especial a Nuria Barrio y Daniel de la Rosa. De la socialista ha dicho que es «una mujer excepcional, prudente y trabajadora»; del alcalde, que es «una buena persona, honesta, trabjadora y enamorada de su trabajo».

«Yo pensaba que iba a ser diputado, casi termino de alcalde y he acabado siendo vicealcalde», ha comentado Marañón, tras recordar que la política municipal «es muy dura». Algo que han podido ver también en primera persona los concejales de Vox, que se han estrenado este mandato, y seguirán el próximo.

Ángel Martín ha defendido a su compañero, Fernando Martínez-Acitores, como «un magnífico compañero de viaje»; y ha asegurado que «el próximo mandato estará lleno de acierto y será bueno para los burgaleses». Él se va pero se queda Martínez-Acitores. También Andrea Ballesteros, que llegó tras la marcha de Javier Lacalle y se ha acabado convirtiendo en la portavoz del PP.

Ballesteros ha tomado la palabra, ha recordado que se han vivido «momentos buenos y malos», que el PP ha hecho una oposición «férrea», que «no le ha temblado el pulso» a la hora de denunciar lo que consideraba que debía denunciar. Eso sí, ni media palabra a la situación del grupo, que se ha quedado prácticamente con cinco ediles tras la marcha de Carolina Blasco, y la encubierta de Jorge Berzosa.

Y desde el PSOE, Nuria Barrio ha recordado los duros momentos d ela pandemia y ha agradecido el trabajo a los socios de Cs. «Nos lo han puesto muy fácil», tanto personal como profesionalmente. «Hay compañeros que lo han pasado muy mal, pero han conseguido muchas cosas», y ahora se verán.